Según la Stanford Children´s Health, el sistema inmunológico mantiene los microorganismos infecciosos, como las bacterias, los virus y los hongos, fuera del cuerpo.
En ocasiones, tiende a debilitarse: una mala alimentación, el estrés, o distintas afecciones pueden evitar que el sistema inmunológico cumpla sus funciones básicas.
Pero ¿Cuáles son señales de alarma?
Cansancio persistente
Cuando este es continuo y, por ejemplo, al levantarnos por las mañanas ya nos sentimos agotados, o ante pequeños esfuerzos acabamos rendidos, esto es una señal de alerta.
Infecciones frecuentes
Si sufres infecciones de orina, molestias de estómago recurrentes, tienes las encías siempre inflamadas y enrojecidas o sufres diarreas a menudo, puede que tu cuerpo te esté dando alertas de un sistema inmunitario debilitado.
Alergias
Influencias como el polen, el polvo, u otros agentes de nuestro alrededor impactan en nuestra piel o nuestras mucosas, y de inmediato, afecta a tu salud.
Si es tu caso es posible también que tengas el sistema inmunitario débil.
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Resfriados
¿Cuántos resfriados sueles tener? ¿Uno cada mes? ¿Te duele siempre la garganta? ¿Te contagias enseguida con las gripes? Si es así, deberías acudir a tu médico para que te haga una analítica y compruebe tu nivel de glóbulos blancos.
Heridas que tardan en cicatrizar
Es posible que cuando te hagas un corte o una simple rozadura, tarde en curarse y cicatrice al cabo de bastantes días y te duela.
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