Dos días. Ese ha sido el tiempo que LeBron James ha permanecido en silencio en Twitter. 48 horas de lento y desesperante recuento de votos en los seis estados claves que deciden quién será el próximo presidente de los Estados Unidos: o el candidato republicano y actual presidente, Donald Trump, o el aspirante demócrata, Joe Biden.
Y con el vuelco en Georgia y Pensilvania a favor de los democrátas del viernes (Pensilvania le dio un día después el triunfo), que puso a Biden a las puertas de la Casa Blanca, el alero volvió y a muy buen ritmo, con cinco mensajes en menos de cinco minutos. Solo el primero era menos político, con un mensaje a su fundación familiar. En el resto, ha disparado a Trump, su enemigo número uno.
Utilizando un tuit con una escena de Dos Policías Rebeldes II, en la que Will Smith gritaba “¡poder azul (el color demócrata), hijos de puta!” tras colarse en un reunión del Ku Klux Klan, saludaba a Georgia y Pensilvania. En el siguiente tuit, escribía: “¡Sí, somos nosotros! ¡Listo para la acción! Mi gente votó para sacar vuestros culos”.
En el siguiente, se reía de un mensaje que comparaba la triste salida de Trump de su última rueda de prensa con el aspecto que tienes cuando tu ataque no funciona en playoffs tras tomarte la temporada regular a broma.
En el último, el más político: “¡¡¡¡Vámonos!!!!! Los votantes negros pasaron… de nuevo. ¡Siéntete orgulloso, pero no te detengas! Debemos mantenernos organizados y seguir trabajando. Solo estamos avisando. ¡Les prometo que estoy aquí para todos ustedes!”.
Cuando en EE UU dieron a Joe Biden ganador de las elecciones al asegurarse los 20 votos de Pensilvania, con los que superaba los 270 necesarios, LeBron volvió a mostrarse muy activo en redes sociales. En primer lugar, recordó la asociación que ha creado junto a otras personalidades de EE UU (More than a vote) para motivar el voto en estas elecciones junto a un vídeo suyo fumando un puro tras ganar el anillo hace un mes.
Después se despidió de Donald Trump en un retuit de la actriz y directora Ava Duvernay y colgó un fotomontaje de un tapón suyo a Iguodala en el que había cambiado su cara por la de Biden y la del ex de los Warriors por la de Trump.
Por último, agradeció a Philadelphia su apoyo a Biden (“¡Mi familia de Filadelfia! ¡¡Gracias, gracias y gracias!! ¡Celebremos! Todavía responsablemente”) y destacaba el gesto de Van Jones (CNN), que se emocionó tras la elección de Biden.
Trump y LeBron, enfrentados desde 2016
LeBron es contrario a Trump desde la precampaña de 2016 cuando apoyó públicamente a Hillary Clinton. Desde entonces, el Rey ha atacado el racismo del empresario, siendo uno de los mayores defensor del Black Lives Matter y de la plataforma para facilitar e impulsar a los afroamericanos para ejercer su derecho al voto.
En los últimos meses, con la burbuja de Orlado a pleno rendimiento y las elecciones a la vuelta de la esquina, Trump y LeBron se han cruzado varios cariños. El todavía presidente criticó que los jugadores de la NBA se arrodillaran durante el himno: “Es vergonzoso”, decía el mandatario, que aseguraba además que apagaba la televisión cada vez que esto ocurría.
“No es aceptable para mí”. “No creo que haya nadie en el mundo del baloncesto que esté triste por perder su audiencia”, contestó el alero de los Lakers. Trump atacó una vez más a su enemigo por el descenso de las audiencias de la Liga norteamericana en uno de sus últimos actos de campaña. LeBron no contestó en ese momento. Solo esperó.
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