El ídolo de la salsa Johnny Pacheco, cofundador de Fania Records, compañero de banda de Eddie Palmieri e impulsor de músicos como Rubén Bladés, Willie Colón y Celia Cruz, falleció. Tenía 85 años.
Pacheco murió el lunes en Nueva York tras haber sido hospitalizado de emergencia días antes debido a una pulmonía, informó su esposa, Cuqui Pacheco, en la cuenta de Facebook del artista.
Fania Records tuiteó que el músico, considerado uno de los “padres de la salsa”, no sólo fue uno de sus fundadores sino “el hombre más responsable del género… Era un visionario y su música vivirá eternamente”.
Integrante original de la Fania All-Stars, Pacheco impulsó como productor las carreras de luminarias que también incluyen a Héctor Lavoe, Cheo Feliciano y Pete “El Conde” Rodríguez.
En un extenso post en sus redes sociales, Blades expresó que “Pacheco nos deja un importante legado musical, representado por todas las colaboraciones que realizó durante su distinguida carrera… Creador de decenas de álbumes, ganador de múltiples Discos de Oro y productor de éxitos de salsa hoy considerados ‘standards’… recibió la admiración de millones de salseros y el respeto de sus colegas”.
Colón tuiteó varias fotografías de ellos juntos a lo largo de las décadas y la leyenda: “DEP mi querido amigo y Maestro… Único”.
Palmieri lamentó la pérdida de su “amigo” y destacó que “su legado como flautista y cocreador de Fania Records vivirá para siempre”.
Pacheco, cuyo verdadero nombre era Juan Zacarías Pacheco Knipping, nació el 25 de marzo de 1935 en República Dominicana en el seno de una familia de músicos. Su padre tocaba danzón y era líder de una big band. En la década de 1940 la familia se mudó a Nueva York escapando de la dictadura de Rafael Trujillo.
Fue músico autodidacta y aprendió acordeón, violín, saxofón y clarinete. Más tarde ingresó a la prestigiosa escuela de artes Juilliard para estudiar percusión y al poco tiempo era un solicitado músico de sesión.
En 1954 formó The Chuchulecos Boys con Palmieri al piano, Barry Rogers en el trombón y otros músicos que cobrarían renombre en la escena de la salsa, como Al Santiago, Mike Collazo y Ray Santos.
Con su orquesta Pacheco y su Charanga, y su álbum debut homónimo, popularizó el estilo de la pachanga, una mezcla de chachachá y merengue que lo llevó de gira por Estados Unidos, Latinoamérica y Europa. Pero el momento que cambiaría su vida llegó en 1963, cuando se asoció con el abogado Jerry Masucci para fundar Fania Records.
Pacheco, quien compuso más de 150 canciones, incluyendo clásicos como “La dicha mía”, “Quítate tú pa’ ponerme yo”, “El faisán” y “El rey de la puntualidad”, era el director musical de la Fania, encargado de buscar talentos, compositor, arreglista y productor.
Una de sus mayores aportaciones a la música fue impulsar el término de “salsa” para el género que surgió de este sello discográfico, y que como su nombre lo indica es una mezcla de ritmos cubanos como mambo, guaracha y chachachá, con ritmos puertorriqueños y merengue dominicano. El nombre de Fania, en tanto, lo tomaron de una canción de Reinaldo Bolaños popularizada por Estrellas de Chocolate en los 60.
Entre sus muchos éxitos también se cuentan su álbum con Cruz “Celia y Johnny” de 1974, con temas como “Quimbara”, “Toro mata” y “El tumbao y Cecilia”, y canciones como “Mi gente” con Héctor Lavoe, “Voy a vivir para siempre” con Willie Colón, “Primoroso cantar” con “El Conde” Rodríguez, “Jícamo y Salsa” con Melón.
Marc Anthony, quien interpretó al difunto Lavoe en la película “El Cantante”, también expresó su pesar por la muerte de Pacheco en Twitter: “Maestro de Maestros y mi buen amigo! Descansa en paz! Estuviste ahí para mí desde el día 1. Tu sentido del humor era contagioso y estaré por siempre agradecido por tu apoyo, por la oportunidad de estar en tu presencia y por tu increíble legado”.
Pacheco recibió el Premio a la Excelencia Musical de la Academia Latina de la Grabación en 2005 y también fue nominado a múltiples Grammy y Latin Grammy.
Le sobreviven su esposa María Elena “Cuqui” Pacheco y sus hijos Norma, Joan, Philip y Ellis Pacheco.
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