Una explosión espectacular del volcán italiano Etna arrojó el domingo una imponente nube de ceniza y piedra de lava sobre los pueblos de Sicilia; se trata de la más reciente serie de explosiones desde mediados del mes de febrero pasado. También los estruendos causados por esta actividad volcánica se sintieron por la población local.
El Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología (INGV) de Italia señaló que la explosión ocurrió a las dos de la madrugada y fue la décima desde el 16 de febrero, cuando el volcán más activo de Europa comenzó a dar una impresionante demostración de la fuerza de su fuego, el cual coloreó el cielo nocturno con impresionantes tonos naranja y rojo.
Los temblores sacudieron la montaña durante gran parte de la noche. Ceniza y pequeñas piedras de lava llovieron sobre ocho poblados de las laderas del monte Etna este domingo, mientras la lava fluía desde el cráter del sureste lentamente por un lado deshabitado, como ha ocurrido en las últimas tres semanas.
La columna de ceniza y lava alcanzó una altura de 10 mil metros, según los científicos que vigilan la actividad volcánica con instrumentos especializados desde un observatorio en el Etna, en el este de Sicilia.
Los habitantes de la zona barrieron la ceniza y las piedras de lava de sus escalones y balcones, ya que cubrieron coches estacionados al aire libre, además los vientos ayudaron a transportar la ceniza hacia el este, precisó el INGV.
No se ha informado de ningún herido o daño grave tras las últimas explosiones a pesar de que Etna se vuelve ocasionalmente especialmente ruidoso y explosivo.
A mediodía de este domingo, la actividad de Etna había disminuido un poco con el fin del flujo de lava, aunque el volcán seguía expulsando una “débil emisión de ceniza” desde el cráter sureste. Pero los temblores volcánicos volvieron a aumentar, dijo el INGV en un comunicado.
Los científicos del INGV afirman que no hay forma de predecir cuándo podría remitir esta ronda de actividad volcánica especialmente intensa.
Sé el primero en comentar