El defensor ambiental Luis Urbano ha sido asesinado esta semana en el centro de Ciudad Obregón, en Sonora.
Hace menos de dos semanas desapareció Tomás Rojo, uno de los líderes históricos de la comunidad, cuando salía a pasear por la
mañana en Vícam, cerca de Cajeme. Todavía no hay rastro de él.
Ambos activistas estaban implicados en la defensa del agua y el territorio frente al crimen organizado y las autoridades federales y estatales.
Estas agresiones son una prueba más de la difícil situación que atraviesa esta tribu, conocida por su larga lucha para proteger el río Yaqui y sus tierras.
Urbano fue asesinado a tiros este martes cuando salía de sacar dinero en un cajero.
El activista, de 36 años, se encargaba de acompañar a las autoridades tradicionales yaquis.
Sé el primero en comentar