El golfista mexicano Carlos Ortiz se ha sentido como en casa en el campo del Kasumigaseki Country Club, y se encuentra a un golpe del liderato en los Juegos de Tokio, pero a diferencia de sus compañeros se desplaza a la competencia desde la Villa Olímpica.
La mayoría de los golfistas se alojan en hoteles cercanos al campo, que está en las afueras de Tokio. Pero Ortiz prefiere el ambiente comunitario de la Villa, a unos 60 km de distancia, donde se levanta temprano para preparar su viaje de 75 minutos.PUBLICIDAD
Comparte habitación con el boxeador Rogelio Romero Torres.
“No creo que tenga ni idea de golf”, dijo Ortiz sobre Romero.
Al ser consultado sobre las estrictas restricciones de la Villa respecto al covid-19 dijo: “Todo el mundo lleva mascarillas todo el tiempo (…) me siento seguro”.
Ortiz terminó con 67 golpes el viernes para llegar a 10 bajo par, lo que lo dejó a un golpe de distancia del estadunidense Xander Schauffele antes de que la segunda ronda se suspendiera debido al mal tiempo.
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