La joven Mahjabin Hakimi, integrante del Club de Voleibol de Kabul, Afganistán, fue decapitada por los talibanes el pasado 13 de agosto.
El asesinato de la deportista aparentemente ocurrió como una advertencia a sus compañeras, a sus familias y a los habitantes de dicha nación, que recientemente presenció la salida de las tropas estadounidenses.
Cabe recordar que con la evacuación de las fuerzas militares de Norteamérica el régimen de los talibanes volvió a ocupar formalmente el poder.
Esto se debe a que cuando los terroristas asumieron el poder por primera vez en la década de los años 90, su aplicación de la ley basada en una interpretación extremista del Islam derivó en graves violaciones a los derechos humanos de las mujeres.
El asesinato de Mahjabin Hakimi fue callado por temor, pero en fechas recientes las fotografías de su muerte se compartieron ampliamente en Internet.
Los medios de Afganistán no las difundieron por respeto a la víctima, sin embargo sus compañeras quemaron sus uniformes y se escondieron por miedo.
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