Los lagos atmosféricos comienzan como filamentos de vapor de agua en el Indo-Pacífico, y se caracterizan por la presencia de vapor de agua lo suficientemente concentrado como para producir lluvia.
El científico atmosférico de la Universidad de Miami, Brian Mapes fue quien recientemente detectó estas tormentas únicas.
Este fenómeno meteorológico se origina como corrientes de vapor de agua desde el lado occidental del monzón del sur de Asia y flotan a lo largo de las regiones oceánicas y costeras en la línea ecuatorial en áreas donde la velocidad promedio del viento es alrededor de cero, y duran días seguidos y ocurren varias veces al año.
En caso de que el vapor de agua de estos lagos se licuara, formaría un charco de solo unos pocos centímetros de profundidad y alrededor de mil kilómetros de ancho, lo que podría convertirse en una precipitación significativa para las tierras bajas secas de los países del este de África.
Sé el primero en comentar