COZUMEL, Q. ROO. –En Cozumel la delincuencia está fuera de control, ya que durante la noche del jueves jóvenes que viajaban a bordo de motocicletas atacaron de manera simultánea tres casetas de policía, ubicadas en las colonias 10 de Abril, Flores Magón III, segunda ocasión en menos de tres días y San Miguel II, en cuyos lugares hay parques en donde decenas de padres de familia platicaban mientras sus hijos estaban en los juegos infantiles, por lo que estas agresiones pudieron resultar fatales para los cozumeleños y como es costumbre, la policía municipal llegó tarde a los sitios donde se registraron los hechos.
Este tipo de agresiones iniciaron desde semanas anteriores sin que las autoridades municipales presentaran las denuncias correspondientes ante la Fiscalía General del Estado (FGE), ya que son seis casetas agredidas en menos de dos meses por parte de los grupos delictivos de la isla.
Los primeros dos casos se presentaron en las colonias Emiliano Zapata, a unas cuantas calles donde se encuentra la cocktelería “La Perlita”, propiedad de la alcaldesa Perla Tun Pech y otro en la colonia San Miguel II, situación que fue minimizada por las autoridades municipales, posteriormente, otras instalaciones, ubicadas en la colonia San Gervasio fueron baleadas durante una madrugada.
El pasado martes reportaron que la caseta policíaca ubicada en la colonia Flores Magón III fue atacada con bombas molotov, por lo tanto, acudieron los bomberos acudieron a sofocar el fuego, pero la autoridad municipal siguió callada en torno al tema, de tal manera que durante la noche del jueves se presentaron otros tres actos delictivos en donde pudieron haber consecuencias fatales, ya que había numerosas personas en los parques están ubicadas estas tres casetas de la Dirección de Seguridad Pública y Tránsito Municipal.
A pesar de llegar tarde a atender la situación, los elementos de la Policía Municipal se encargaron de evitar que la ciudadanía y los medios de comunicación documentar los hechos detrás del área acordonada, tal como lo establece el Nuevo Sistema Penal.
Lo anterior generó que un grupo de ciudadanos de la colonia Flores Magón III exigieran mayor seguridad a los policías, ya que era la segunda ocasión en tres días que han aventado bombas molotov en la caseta policíaca y en vez de respuestas recibieron agresiones de los policías porque no saben que hacer por garantizar la seguridad en este destino turístico.
Mientras todo esto ocurría en Cozumel, el director de Seguridad Pública y Tránsito Municipal, Raúl Sánchez Martínez, se encontraba en la Ciudad de México tratando de obtener un documento que acredite que pasó el examen de control y confianza para continuar en el cargo y seguir cobrando si jugoso sueldo de 60 mil pesos al mes por no hacer nada por la seguridad de turistas y cozumeleños.
Sé el primero en comentar