CIUDAD DE MÉXICO. –A una semana del terremoto que enlutó hogares en el sur de la Ciudad de México, algunas familias acudieron al monumento de “La Familia” para depositar flores y arreglos, así como soltar globos blancos, en memoria de los 19 niños y siete adultos que perdieron la vida en el Colegio Rébsamen.
Las estatuas conformadas por dos niños y sus padres se ubican en el crucero de Acoxpa y Prolongación División del Norte, el cual está cubierto de flores blancas y globos de diferentes colores y formas en memoria de los niños que perdieron la vida a consecuencia del terremoto del 19 de septiembre a las 13:14.
Ahí mismo se encuentran veladoras y solo una de ellas se encuentra prendida. A la hora en que se sintió el movimiento telúrico de magnitud 7.1, tres familias guardaron silencio y un minuto después soltaron los globos que llevaban.
Karen Campos y su mamá Rocío Urbina, dijeron en entrevista que la Ciudad de México no es la misma “la veo triste y se palpa un ambiente triste”.
No es la misma. “Hay un ambiente de tristeza por todos lados, es como si estuviéramos en shock, del cual todavía no salimos”, expusieron.
Indicaron que no hay palabras para decirles algo a los padres que perdieron a sus hijos en el colegio que se cayó el día del temblor. Sin embargo, agregaron, estamos con ellos, “compartimos su dolor y tristeza”.
Alejandro Díaz Infante, acompañado por sus hijos, uno de ellos dejó un arreglo floral de claveles color rosa. “Venimos a brindarles tributo a los niños y maestros caídos durante el temblor que ocurrió hace una semana”.
La señora Ana Villegas, quien también venía acompañada por sus hijos y amiga de uno de las familias que perdió a su hijo cuando se colapsó uno de los edificios del Colegio Rébsamen, traía en su mano varios globos de color blanco.
Luego de soltarlos junto con otras familias que se dieron cita en el Monumento a “La Familia”, externó que es difícil asimilar lo que está ocurriendo en algunos lugares de la Ciudad de México.
Sin embargo, dijo, la vida debe seguir, ya que ante la naturaleza nada podemos hacer. “México está de luto y será por mucho tiempo”, expresó.
Otro padre de familia quien solicitó amablemente que no le grabaran, junto con sus hijos y esposa, llevaba entre sus manos un nicho, soltaron globos en recuerdo de los alumnos.
La obra de Elisa Ponzaneli está cubierta de ofrendas florales de diferentes tamaños, así como de algunas coronas que han sido dejadas por vecinos de diferentes colonias del sur de la Ciudad de México.
Al pie de la estatua se encuentran velas, de las cuales solo queda una encendida. En tanto sobre Prolongación División del Norte siguen colocando ofrendas florales sobre el camellón. (Fuente: Excelsior).
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