Venezuela importará de Rusia trigo ante la escasez de materias primas; el férreo control de las divisas lleva el precio de un bolillo a los 18 dólares
CIUDAD DE MÉXICO.- Ante la escasez de bienes básicos, Venezuela ahora importará pan… desde Rusia.
El presidente Nicolás Maduro anunció que el país sudamericano firmará un acuerdo con su par ruso, Vladimir Putin, para que Moscú suministre trigo panadero durante los próximos 2 años.
Con ello, abastecerían a 10 mil panaderías venezolanas y combatirían una presunta “mafia panadera”, dijo el Mandatario.
“En los próximos días, por orden del presidente Vladimir Putin, vamos a cerrar un acuerdo para garantizar todo el trigo que necesita Venezuela para su pan y para su vida en lo que resta de año, así como para 2017 y 2018”, expresó Maduro.
Venezuela padece por la escasez de uno de cada tres productos básicos, con desabasto en particular de harina de trigo.
“Queremos y podríamos producir más, pero no nos dejan al negarnos el acceso a las materias primas importadas o asignarnos volúmenes muy por debajo de nuestra capacidad de producción”
La mayor empresa alimentaria, Polar, anunció en septiembre que su producción ha caído 30 por ciento durante este año debido a la falta de insumos -acusa que no puede conseguirlos por el control férreo del tipo de cambio a dólar- y que la mayor caída se ha dado en el maíz refinado que vende en supermercados.
“Queremos y podríamos producir más, pero no nos dejan. Al negarnos el acceso a las materias primas importadas o asignarnos volúmenes muy por debajo de nuestra capacidad de producción, en aquellos casos en los que el gobierno nacional es el que importa directamente las materias primas, nos obligan a producir por debajo de nuestra capacidad”, denunció el director de alimentos de la empresa, Manuel Felipe Larrazábal, al medio local El Informador.
Maduro, por su parte, acusa que hay una “guerra económica” en contra de su Gobierno, y achaca el desabasto a las tiendas y empresarios que acaparan productos.
“Hay que cortarle las manos a las mafias panaderas y a las mafias del trigo que tienen al pueblo sufriendo”, destacó al hacer el anuncio de la importación rusa.
Mientras, panaderías cuelgan anuncios que dicen: “no hay pan”, según imágenes compartidas en redes sociales. Y habitantes del país sudamericano deben hacer diario largas filas para intentar conseguir la comida que sí está disponible en mercados.
Además, dada la alta inflación en Venezuela -de 750 por ciento, según el Fondo Monetario Internacional-, cuando sí hay pan, queda fuera del alcance de muchos.
El salario mínimo mensual venezolano es de 23 dólares al tipo de cambio actual. Un bolillo cuesta 180 bolívares venezolanos, alrededor de 18 dólares con el cambio de divisa oficial.
Mientras que un kilo de harina alcanza los 190 bolívares -19 dólares-, según testimonios de reposteras y consumidores al diario El Nacional.
Foto: El Debate
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