Una empleada doméstica fue detenida, después de que la sorprendieron introduciendo la mano y brazo de una bebé a una olla con agua hirviendo.
Una bebé de 16 meses tuvo que ser hospitalizada en Singapur por las quemaduras de segundo grado que presentaba en su extremidad superior izquierda.
La pequeña fue llevada a la clínica por la propia ama de llaves, de 30 años, y le comentó a los doctores que la bebé se había quemado por tocar una olla caliente.
Esta versión no convenció a los médicos, por lo que le aconsejaron a los papás de la menor investigar lo sucedido.
Luego de revisar el registro de las cámaras de seguridad instaladas en la vivienda, Amy Low, madre de la bebé, se topó con la imagen de la empleada metiendo varias veces el brazo de su hija en una olla con agua hirviendo.
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