>>Desde el paso de la Tormenta Tropical Gamma, 5 días antes de Delta, la caída de árboles comenzó a generar residuos vegetales
CANCÚN, QUINTANA ROO.- A más de un mes de que el Huracán Delta generara estragos en la distribución de energía eléctrica, de agua; que dañara las vialidades, el equipamiento urbano y derribara una cantidad considerable de árboles, el Ayuntamiento de Benito Juárez dejó inconclusa la recoja de basura vegetal.
SERVICIOS PÚBLICOS INOPERANTE
Previo a la llegada de la tormenta Gamma y el Huracán Delta, el Ayuntamiento de Benito Juárez trabajaba en la justificación para quitar la concesión a la empresa Intelligencia México y pagarle hasta 700 millones de pesos.
Los residuos que ya se habían acumulado, más los conflictos laborales que presuntamente también se habrían provocado premeditadamente, dejaron a Cancún con dos conflictos graves, la acumulación severa de residuos sólidos urbanos y los restos vegetales de árboles y vegetación en general que obstruyeron vialidades, dañaron viviendas y redes de distribución eléctrica.
La “solución” que improvisó el Ayuntamiento de Benito Juárez fue convertir a los vehículos de Servicios Públicos en recolectores de basura.
Además, habilitó tiraderos a cielo abierto para depositar los residuos sólidos urbanos, un hecho que representa la comisión de un delito grave, en tanto puso a sus trabajadores a retirar los desechos vegetales únicamente de las principales vialidades para colocarlos en parques y camellones.
LA CIUDADANÍA RESOLVIÓ CUANTO PUDO
A falta de soluciones, la ciudadanía tuvo que pagar a camiones particulares para que recogieran los restos vegetales de calles, andadores y camellones.
Muy pocos fueron los lugares en donde los ciudadanos resolvieron la problemática, por lo que, hasta la fecha y aun cuando, en teoría, la empresa Intelligencia México estaría ya realizando el trabajo de recolección de residuos sólidos urbanos, el Ayuntamiento sigue sin levantar los restos vegetales.
BASURA, UN TEMA SIN SOLUCIÓN
La intentona de enriquecer a los socios de la empresa Intelligencia México y a los miembros del Cabildo de Benito Juárez, presidenta incluida, que operaron la crisis de la basura en Cancún a fin de hacerse de 700 millones de pesos falló al llegar la iniciativa al Congreso del Estado.
Ante estos hechos, Intelligencia México está obligada a cumplir con los compromisos pactados en el contrato de concesión hasta que se encuentre una solución, que evidentemente tendría que apuntar a rescindir el contrato sin que ello represente una erogación para el erario público.
Pero, mientras ello se soluciona, la recoja de basura continúa siendo un tema de caos en Cancún, pues la empresa no cuenta, ni contó en ningún momento con la capacidad técnica para operar.
Pero lo ciudadanos tendrán también que acostumbrarse a un paisaje muy desolador pues los residuos vegetales no se retirarán, toda vez que el Ayuntamiento tampoco cuenta con la capacidad para hacerlo.
Menos aún cuando todo el dinero y los recursos humanos están ya aplicados a las campañas proselitistas del proceso electoral 2020-2021.
Sé el primero en comentar