CIUDAD DE MÉXICO.- Este viernes, la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) dio a conocer que la aeronave en la que murieron la gobernadora Martha Erika Alonso y el senador Rafael Moreno Valle, junto con tres personas más, no presentó falla alguna.
A través de un informe, la inspección a los dos motores Pratt & Whirtney PW207C indica que los daños y rastros que presentan denotan que estuvieron en funcionamiento al momento del impacto.
“Los componentes de memoria interna que podrían confirmar lo anterior resultaron dañados por el impacto y el fuego, por lo que no se pudo obtener datos de estos”, refiere el texto.
La dependencia agregó la inspección a los cinco actuadores lineales, por medio de tomografía computarizada, no arroja daños internos. Mientras que el escaneo por medio de tomografía computarizada de los 3 actuadores hidráulicos, realizada en Cascina Costa, Italia, tampoco detectó “daños internos importantes ni residuos metálicos, las fracturas y deformaciones identificas se considerar compatibles con los daños ocasionados por el impacto”.
Asimismo, la SCT señala que no hubo evidencias de una falla previa al impacto en los componentes involucrados en los controles de la aeronave, entre ellos el rotor principal y de cola, la transmisión y caja de 90°. Además, el análisis de 2 de las 4 luces del master warning y master caution, de acuerdo con la SCT, muestra que estuvieron encendidas antes del impacto, pero aún no se determina en qué momento del vuelo se prendieron. (El Heraldo de México)
Avance de la investigación del percance ocurrido al helicóptero marca Augusta A109S matrícula XA-BON el 24 de diciembre de 2018.
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— SCT México (@SCT_mx) June 7, 2019
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