Debido a la demanda del servicio de ferry, como ha sucedido en otras ocasiones, se han formado aglomeraciones en las filas y afuera de la terminal marítima.
Las empresas navieras, Ultramar y Winjet, si bien cuidan de no excederse en los aforos en sus navíos; Navega, la concesionaria de la terminal marítima, también limita el número de personas que pueden ingresar a su recinto.
Pero afuera, Ultramar tiene instalada una taquilla, la que genera una fila de cerca de dos horas de espera, según testimonio de usuarios.
Debido a la contingencia sanitaria, Winjet y Ultramar obtuvieron un documento del Gobierno Federal que les permite reducir su número de cruces e incluso evitar competencia, turnándose las salidas.
TE PUEDE INTERESAR: Acusa Lydia Cacho a jueza de Quintana Roo de ayudar a Mario Marín
