Por: Adriana Olvera
Playa del Carmen.- Una joven de 18 años de edad, quien sufre trastornos mentales y está discapacitada intelectualmente, vive desde hace meses con un hombre que la golpea y que la controla a través de las drogas, sin que la madre de esta víctima pueda hacer algo, ya que esta mujer ya es mayor de edad.
En rueda de prensa, Maricarmen Rendón Islas dio a conocer la situación que vive su hija desde junio de este año, que es cuando se fue de casa y cayó en manos de un sujeto, presuntamente prófugo de Chiapas, quien la golpea y mantiene drogada.
Su hija padece de trastorno limítrofe de personalidad, por lo que es considerada discapacitada intelectual, lo que se corrobora con un diagnóstico psiquiátrico, en el que se indica que esta mujer requiere de tratamiento, además de cuidados y supervisión.
En junio, la joven desapareció, por lo que su madre interpuso una denuncia y comenzó a buscarla por su cuenta. Una semana después, la halló vendiendo marquesitas frente al Palacio Municipal, lo que le mostró que las autoridades no la habían buscado.
La joven, trastornada por la falta de medicamentos, se negó a irse con su madre, y como ya tiene la mayoría de edad, las autoridades señalaron que no podían obligarla.
Al poco tiempo, Maricarmen descubrió que su hija estaba con un sujeto que la violentaba física y psicológicamente. Aunque ella acudió con la Fiscalía General del Estado, y logró rescatarla, las autoridades no la llevaron con el médico legista, pues esta joven se negó a ir.
Pese a que la madre les dijo que su hija está discapacitada, y que estaba golpeada, los agentes liberaron a su hija, quien abandonó el edificio de la Fiscalía. Maricarmen la siguió, pero su hija abordó una patrulla, que se la llevó con su propio agresor.
“No puedo interponer una denuncia, porque la Fiscalía me dice que está bien con este hombre”, narró esta mujer, quien ya le ha suplicado al gobierno municipal y estatal alguna alternativa para rescatar a su hija.
“Tengo que iniciar un juicio, pero son bastantes requisitos y tomará tiempo”, comentó. “Ruego por alguna alternativa para traerla a casa o ingresarla en algún centro especializado, porque su salud está en riesgo”.
De la supuesta pareja, esta mujer dice que solo sabe que se hace llamar Cristian Aguilar, pero no se trata de su nombre real, pues es alguien que está prófugo de Chiapas, en donde fue denunciado por violación.
“Les informé de esto a la Fiscalia, y me dijeron que tenían que realizar un proceso para saber si cuenta con alguna orden de aprehensión”, comentó la madre.
SIN ALTERNATIVAS EN QUINTANA ROO
Maricarmen Rendón comentó que en Quintana Roo no hay prácticamente opciones para familias con algún hijo con discapacidad mental, pues no existe ninguna institución o albergue por parte de gobierno.
En Playa del Carmen existe una escuela particular, que cobra 8 mil pesos mensuales, pero en el gobierno ignoran su existencia y no refieren a nadie con ellos. En Cancún también hay una asociación civil, pero no hay opciones públicas.
Ariadne Song Anguas, integrante de la Red Feminista de Quintana Roo, hizo un llamado a los diputados para que volteen a ver esta problemática, ya que no hay ningún sistema de cuidados para quienes sufren problemas mentales o adicciones.
A diferencia de Yucatán, en Quintana Roo no hay algún hospital de salud mental y los pocos albergues que existen para mujeres no reciben a personas con problemas mentales o adicciones, para no poner en riesgo a las demás albergadas.
En el estado hay muchas madres quienes deben cuidar a hijos, que a menudo las superan en tamaño y fuerza, quienes pueden incluso agredirlas por algún brote psicótico.
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