CHETUMAL, Q. ROO.- El titular de la Fiscalía General del Estado (FGE), Miguel Ángel Pech Cen, dio a conocer que una de las líneas de investigación en el caso de los artefactos explosivos hallados en un navío de Barcos Caribe apunta al autoatentado.
En una entrevista que dio al noticiero “Despierta” de Carlos Loret de Mola, Pech Cen dijo que el autoatentado es una hipótesis dentro de la investigación por la forma en que la noticia se propagó a través de las redes, ya que fueron buzos de la propia empresa naviera los que difundieron las imágenes.
Miguel Ángel Pech reiteró que la Fiscalía de Quintana Roo respondió de forma inmediata tras la explosión del ferry el pasado 21 de febrero en Playa del Carmen, “privilegiando la salud y la vida de las personas, aunque el lugar es una jurisdicción federal”.
El fiscal explicó que después de la explosión, la subdelegación de la PGR “entró directamente a trabajar por tratarse de naturaleza federal y, en forma conjunta, se embalaron y se han remitido al laboratorio de la Ciudad de México todo esto, para entregar el resultado”.
Destacó además el trabajo de la Fiscalía en colaboración con la delegación de la Procuraduría General de la República (PGR), la Secretaria de la Marina y Defensa Nacional.
Sobre el incidente del 1 de marzo, el fiscal detalló que en redes sociales empezaron a difundir la existencia de un artefacto amarrado en el ancla de la embarcación. Aclaró que “no era un barco que estaba cruzando, sino en uno de los barcos que está fondeado a más de 500 metros del muelle de Cozumel y que tiene más de diez meses de no estar operando”.
Pech señaló que “resulta extraño que los buzos de esta empresa hayan difundido a través de redes y otros medios que se haya encontrado este artefacto”. Reveló que buzos de la Marina lograron destrabar el artefacto y entregarlo a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), “que es la encargada ahorita de hacer lo pertinente”.
Estamos buscando todos los datos de pruebas necesarios para tener una certeza, hasta ahorita no lo podemos afirmar”, dijo respecto a si se sospechaba de un atentado.
Aclaró que es una de las hipótesis de investigación debido a la forma en que se propagó la noticia, a través de las redes.
Insisto, este barco donde fue encontrado este artefacto no explosivo es otro barco de esta compañía, pero que está fondeado hace más 10 meses a 500 metros del muelle de Cozumel”, reafirmó.
“Al llegar personal de la Secretaría de la Marina realizaron los trabajos de desamarre de los supuestos objetos extraños y los entregaron a personal de la Defensa Nacional, instancia que por ley, le corresponde determinar si se trata o no de un artefacto con explosivos, sin embargo el fiscal general fue puntual al referir “hasta donde tenemos entendido no lo es, tenemos que descartar el término explosivo, y compete a las autoridades correspondientes emitir el dictamen final”.
Sobre reporte de colaboración del FBI en el caso, el fiscal Miguel Ángel Pech precisó que “desde el momento de los hechos, la embajada de Estados Unidos se puso a nuestra disposición para colaborar con las investigaciones, aún no se ha presentado, cualquier tipo de investigación que hiciera sería a través de nosotros como colaboración, exclusivamente”.
Explicó que, debido a que hubo ciudadanos estadounidenses en el hecho registrado el 21 de febrero, autoridades de EU “ofrecieron también colaborar bajo nuestra dirección en todo lo que pudieran realizar”.
Dijo que, en un primer intento de colaboración, les proporcionaron todos los videos que se habían difundido en redes sociales “y ahí inició su propia investigación”.
Sobre las líneas de investigación de la explosión del ferry en febrero, Pech señaló que la primera línea fue de un mal mantenimiento que tenían los barcos.
“Todo lo que fue recolectado, embalado por parte de PGR fue directamente llevado a los laboratorios de PGR en la Ciudad de México y estamos en espera de que ellos emitan directamente el dictamen final”, dijo sobre si había indicios de explosivos en ese incidente del 21 de febrero.
Cuestionado sobre si podría tratarse de un atentado terroristas, dijo que es algo que no podrán afirmar.
“Sería muy aventurado y además poco ético de nuestra parte porque no tenemos elementos de prueba”, señaló.
Este mismo día, a través de la misma Fiscalía se dieron a conocer detalles de los supuestos artefactos explosivos en la embarcación.
Se señala que de acuerdo con el el titular de la FGE, comentó que agentes de la Policía Ministerial acudieron a las oficinas de la empresa (Barcos Caribe) para verificar la veracidad de la noticia, pero los trabajadores dijeron que desconocían tal información. Además la FGE acudió al lugar para corroborar los datos, sin embargo no lograron constatar de manera fehaciente la existencia de tales objetos “salvo por comentarios de un buzo de la misma empresa que descubrió que se encontraban amarrados a la propela lo que posiblemente eran artefactos desconocidos”.
Al llegar personal de la Secretaría de la Marina realizaron los trabajos de desamarre de los supuestos objetos extraños y los entregaron a personal de la Defensa Nacional, instancia que por ley, le corresponde determinar si se trata o no de un artefacto con explosivos, sin embargo el fiscal general fue puntual al referir “hasta donde tenemos entendido no lo es, tenemos que descartar el término explosivo, y compete a las autoridades correspondientes emitir el dictamen final”.
