Agencia EQR
BACALAR, Q. ROO. –El balneario que administra el Ayuntamiento de Bacalar, denominado “El Aserradero” ha pasado de ser ejemplo a nivel nacional a vinatería, debido a que cualquier persona puede adquirir bebidas embriagantes sin ninguna restricción.
En septiembre de 2015, ese espacio recreativo (anteriormente de acceso libre), recibió el distintivo ‘Blue Flag’ que se le otorga a las playas, embarcaciones y marinas del país que alcanzan la “excelencia” en la gestión y manejo ambiental, calidad de sus instalaciones y medidas de seguridad e higiene, aplicación de actividades de educación e información ambiental, así como haber alcanzado niveles óptimos de calidad de agua.
Bacalar fue el primer cuerpo de agua en recibirlo, por lo que se consideró ejemplo a nivel nacional. Sin embargo, a partir de la actual administración municipal a cargo de Alexander Zetina Aguilluz, se aplicó un cobro por el uso de estacionamiento de diez pesos y por el ingreso a los sanitarios de cinco pesos. Nadie dijo nada y se instaló una especie de tienda en una de las palapas, tampoco nadie se opuso y ahora ya cuenta con venta de cerveza, y a diferencia de los restaurantes, no es necesario el consumo de alimentos para poder comprar, es decir funciona igual que un punto Modelo, como el que recientemente se instaló sobre la avenida Libramiento o el “Joshuara” de todos conocidos.
Alexander Zetina evidenció una vez más su voracidad por sacar negocio en su fugaz paso por el Ayuntamiento, a costa del riesgo de perder esta nominación, porque dejaron a un lado criterios que establece la permanencia del programa, como las acciones de educación ambiental tales como un panel informativo, un quiosco de información, crear programas de conciencia y cuidado del ecosistema, promover la sustentabilidad de las actividades recreativas y turísticas de la zona, de las que no se observan sean implementadas por parte de la autoridad municipal.
El lugar debe contar con información actualizada y a la vista sobre la calidad del agua, contar con información pública sobre los ecosistemas litorales, espacios naturales sensibles y especies protegidas en esa zona costera, así como de los fenómenos ambientales, que tampoco existen en el balneario municipal “El Aserradero”, donde ondea la bandera azul que fue colocada hace dos años, cuando recibió tal distinción.
