CANCÚN, Q. ROO.- Un veloz conductor se echó un fresco chapuzón con todo y su automóvil Volkswagen; por si fuera poco, en piscina ajena, y casi a la medianoche del lunes.
Los vecinos de la calle Monte Nevero, de la Región 255, fueron despertados por un fuerte estruendo. Al salir de sus hogares, se fueron de espaldas al ver que se trataba de un desafortunado desconocido que nadaba dentro de una alberca con todo y su vehículo, un sedán de color blanco, marca Volkswagen, matrícula UUW3873.
Aún sin poder dar crédito a lo que veían, los propietarios de la casa solicitaron ayuda al número de emergencia 911, mientras el espantado y húmedo chofer les explicaba que se había quedado sin frenos, introduciéndose a gran velocidad por la cerca del predio y terminando en el fondo del agua.
Paramédicos de la Cruz Roja determinaron que el conductor no había sufrido daños físicos, y solamente le recomendaron tomar un par de aspirinas para que le fuera más ligero el resfriado.
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