CANCÚN, Q. ROO.- El obispo de la prelatura Cancún-Chetumal, Pedro Pablo Elizondo Cárdenas, se dijo preocupado porque Cancún es la ciudad donde más violencia intrafamiliar existe; “así lo dicen las estadísticas de llamadas al C4 (Centro de Control, Comando y Confianza), así que lo que se debe hacer es erradicar el odio y el coraje hacia el interior del hogar”.
Al preguntarle sobre las condiciones de violencia en el núcleo familiar, Elizondo Cárdenas explicó que hay varios factores; uno de ellos tiene que ver con la situación física en la que viven las familias, porque los conjuntos habitacionales no son los mejores, las cuarterías, las casitas de interés social, que no están aptas según la ley, por ello es que se crean condiciones de malestar.
A todo ello se le suma que no se cuenta con lugares agradables, como son las plazas y que las situaciones urbanas de Cancún no ayudan nada, pues se desata la violencia. Puso de ejemplo que este tipo de habitación tan reducida ya se canceló en otros países, tanto que en Francia el gobierno decidió derribar los edificios con tales características.
El prelado amplió su respuesta al decir que también los horarios de trabajo no siempre son los más adecuados para la convivencia familiar, porque cuando los niños tienen vacaciones, es cuando más trabajo se tiene en los lugares turísticos.
“Cuando hay dificultades hay que buscar los medios y los recursos para solucionarlos, hay que proponerse la convivencia, que las familias se den ese tiempo de vacaciones, porque cuando vienen nuestros parientes los tenemos que atender”, dijo.
INVITACIÓN A LOS CATÓLICOS
Entrevistado después de la homilía de este domingo, anunció que será este sábado 13 de mayo, a las 5:00 de la tarde en el estadio “Andrés Quintana Roo” de Cancún, cuando se lleve a cabo la oración por la paz, en el marco de la celebración de los 100 años de la aparición de la virgen de Fátima.
El purpurado recordó que, por instrucciones del Papa Francisco, todos los días 13 del 2017, los practicantes del catolicismo se reunirán para orar por la paz de su ciudad, su estado y del mundo, para que “la virgen nos ilumine”.
SEGURIDAD
En cuanto al tema de seguridad, Monseñor habló sobre la aplicación de las medidas de seguridad que ayuden a bajar los índices delincuenciales, como son el restringir los horarios de los bares, el combate al consumo de las drogas y alcohol, que estos últimos afectan las neuronas del cerebro y “la mente hace conductas erráticas, porque están afectadas. El horario de venta de alcohol se debe aplicar en todo el estado”.
Reconoció que las autoridades de los tres niveles de gobierno están conscientes y ponen de su parte para el combate a la inseguridad, porque ya se ha incrementado la vigilancia, están poniendo empeño en ello, pero “hay factores de prevención y de capacitación de los elementos responsables, de todos los ciudadanos, la calidad de las personas, la calidad humana, la calidad psíquica, ese es el gran reto, rezamos y pedimos al señor que nos trajo la paz. Todos los católicos estamos unidos rezando por la paz de Cancún, del Estado y del mundo”.
Sé el primero en comentar