Una nube lenticular envolvió al volcán Popocatépetl la mañana de este viernes, lo que atrajo miradas, pues regularmente el cráter luce en todo su esplendor.
Este tipo de nubes dan la impresión de ser platillos voladores gigantes, pero de color blanco, un fenómeno natural que requiere fuertes corrientes de aire y una montaña.
Las nubes lenticulares se forman generalmente alrededor de colinas y montañas.
Según la explicación, el viento debe soplar fuerte y constante, al chocar contra la montaña se eleva y vuelve a bajar, lo que hace que se ondule y cuando el aire se enfría adoptar esta forma porque quedan atrapadas en formas ondulatorias.
El suceso dejo maravillosas fotos dignas de postal.
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