En el Informe Anual de Amenazas de la Comunidad de Inteligencia de Estados Unidos, elaborado por la Oficina del Director de Inteligencia Nacional, se especificó que las organizaciones criminales transnacionales (OCT) mexicanas consiguen el precursor para fabricar el fentanilo al rehuir a las inspecciones etiquetando mal el producto o importando químicos que tienen doble uso.
De acuerdo a dicho estudio, los intermediarios de productos químicos pueden eludir los controles internacionales a través de envíos mal etiquetados y adquiriendo productos químicos de doble uso no regulados.
El gobierno de Estados Unidos reiteró que los cárteles mexicanos obtienen la mayor parte de los precursores químicos necesarios para producir fentanilo en territorio chino.
Así también, se especificó que las OCT mexicanas son las principales productoras y proveedores de drogas ilícitas en el mercado estadounidense.
