CANCÚN, Q. ROO. –Se dio a conocer que los abogados, que representan en la mayoría de los casos a personas que están presuntamente implicadas en delitos graves, son los que incurren en esta vieja práctica a fin de que su cliente sea exonerado o consiga un amparo que le brinde la protección de la justicia y no sea detenido por la infracción que se le acusa.
Un trabajador de estos sitios reconoció que muchos abogados brindan dinero o algunas otras prebendas a los agentes de ministerios públicos, secretarios de acuerdos e incluso jueces, con tal de obtener un veredicto favorable para su cliente.
Si, hemos sabido de litigantes que ofrecen cantidades importantes de dinero por haber favorecido a sus clientes; los abogados son los que fomentan esa mala práctica”, dijo el entrevistado.
Dejó ver que quizá los malos sueldos (en comparación con otros estados) que tiene el personal de los juzgados es lo que genera esta situación, ya que en Quintana Roo un juez gana alrededor de 45 a 50 mil pesos mensuales en comparación de los 150 mil que pagan en otras entidades; y un secretario de acuerdo entre los 32 al mes, por los 80 mil de otros lugares.
PARA ASEGURAR EL RESOLUTIVO
El trabajador dejó en claro que la corrupción no se justifica bajo ningún medio, pero que los abogados promueven esa mala práctica de corromper a las autoridades y se aprovechan en muchas ocasiones de la necesidad de los agentes.
Dejó en claro que esta práctica, aunque inmoral y fuera de toda ética, no es común en los juzgados de Quintana Roo, sino que son situaciones que se dan por lo complicado de los casos y los abogados lo promueven quizá ante el temor de que la resolución no les favorezca.
Dejó en claro que cómo cualquier funcionario está expuesto a estos señalamientos y que infortunadamente cuando unas personas no son beneficiadas en sus pretensiones, o un abogado no tiene una sentencia favorable de su cliente, también se les señala de que “recibieron dinero”.
Recordó que hace un par de semanas un abogado que no se vio favorecido por una orden de aprehensión para su representado, el primer comentario que le hizo fue ese “que cuánto me dieron”.
VIDA DE REYES
Otro empleado de los juzgados dijo que es muy difícil comprobar esta cuestión de primera mano, ya que los “apoyos” o la corrupción no se da dentro de los juzgados, sino que en otros lugares en donde se acuerda el trato.
Refirió que la corrupción que impera en estos sitios se puede comprobar, ya que muchos jueces, secretarios, ministerios públicos e incluso agentes ministeriales tienen una vida de lujo no acorde al ingreso que perciben.
Coincidió con el primer entrevistado al decir que la corrupción en estos sitios es un secreto a voces, no una leyenda urbana, y en donde la ley se dictamina al mejor postor, aunque no en la mayoría de los casos.
Reconoció que hay personal que respeta la ley y que tiene una trayectoria intachable, pero que a otros les gana la “cosquilla” de tener dinero fácil.
Sé el primero en comentar