CALIFORNIA.- Un niño de cuatro años llamado Evan pidió a su madre que lo disfrazara de una princesa Disney y lo llevara a Disneyland, por lo que cuando ella aceptó esta petición cumplió uno de los sueños de su hijo.
Evan vive en California, tiene autismo y sufre de microcefalia como consecuencia de las drogas que su madre biológica consumía durante su embarazo.
En la actualidad está al cuidado de Eeka Rocha McLeod, la mujer que funge como su madre adoptiva y quien lo llevó a Disneyland caracterizado como las diferentes princesas de esta compañía.
En estas, el pequeño cuenta con el respaldo de más de 13 mil seguidores que lo apoyan y admiran en su decisión de ser una princesa y disfrazarse, en ocasiones, de villanas Disney.
Aunque también existen usuarios y familias que se burlan de Evan, Eeka ha dicho que él y todos sus hijos son aceptados y amados por ser lo que son. (Televisa news)
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