El presidente Andrés Manuel López Obrador denunció una “estrategia de la oligarquía, de los que se sentían dueños de México” que consiste “en lanzar a todos los medios, con honrosas excepciones, en contra de nosotros”.
“No se había visto una lanzada de los medios en contra del Gobierno como ahora”.
Explicó que “el sistema corrupto de control de medios le costaba mucho dinero al pueblo, miles de millones de pesos, porque les tenían que dar contratos de obras, les tenían que dar hospitales, reclusorios, carreteras, la construcción de aeropuertos”.
Señaló que los dueños de los medios de información querían a los medios para “tener la influencia suficiente para que el Gobierno les diera todo lo que pedían”.
Reiteró que su Gobierno garantiza la libertad de expresión y dijo que no habrá censura, pero explicó que él hará uso de su derecho de réplica cuando los medios de información difundan noticias falsas.
A su vez, refirió que tiene la obligación de informar al pueblo.
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