El presidente Andrés Manuel López Obrador descartó la compra de la marca Mexicana de Aviación para la nueva aerolínea que operará la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
Lo anterior es debido a que el plazo otorgado para que los extrabajadores se pusieran de acuerdo concluyó y siguen habiendo disputas por lo que estimó que su administración no comprará un pleito laboral.
“No, porque la marca quedaría en litigio y no queremos comprar un pleito, pero lamentable. Y quisimos, les hice un llamado a los abogados y a los trabajadores y no. Entonces ya estamos esperando, tengo una reunión el sábado para decidir esto. Y aquí vamos a informarles que lamentamos mucho, pero no vamos a poder comprarles la marca”.
El titular del Ejecutivo recordó que esto se debe a que se metieron abogados con quiénes se intentó dialogar y llegar a un acuerdo.
“En vez de que el dinero se distribuya parejo, como se había acordado en asambleas, se meten los abogados, encampanan y dicen no. Se van al Poder Judicial, meten amparos y nosotros no podemos estar esperando porque tiene que empezar a funcionar la línea y tiene que tener un nombre”
Pese a que no concedió cuál sería el nombre de la nueva aerolínea, dijo que ya se han registrado varias posibilidades y que en diciembre la compañía estaría operando con 10 aviones.
De acuerdo a los registros del Instituto Nacional de la Propiedad Intelectual, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) a través del Grupo Aeroportuario, Ferroviario, de Servicios Auxiliares y Conexos, Olmeca-Maya-Mexica S.A. de C.V. comenzó el registro de la marca “Aerolínea Maya” el pasado 6 de junio.
Hay al menos 10 propuestas de logotipos y el nombre de la nueva línea aérea.
El INPI indicó que los giros para los que se ha registrado la marca Aerolínea Maya corresponden a publicidad, gestión, organización y administración de negocios comerciales, trabajos de oficina, comercialización de productos promocionales, embalaje y almacenamiento de mercancías, así como la organización de viajes.
