MANCHESTER, INGLATERRA.- El Estado Islámico ha reivindicado el ataque ocurrido la noche del 22 de mayo en la ciudad de Manchester, Inglaterra.
Minutos después de haber concluido el concierto de la cantante estadounidense Ariana Grande, dos explosiones cimbraron el Manchester Arena, el estado más grande de Reino Unido, en donde la mayor parte de los asistentes eran jóvenes y niños.
En un comunicado difundido por uno de los grupos con los que la organización terrorista cuenta en Telegram, el EI expresó que “uno de los soldados del Califato logró colocar un artefacto explosivo durante un encuentro en la ciudad de Manchester”, sin dar más detalles de los hechos.
La Primer Ministra, Theresa May, calificó el acto de “cruel” al haberse dirigido a la población más joven, de los cuales se han confirmado 22 muertos y más de 50 personas heridas de gravedad.
Hasta ahora las autoridades han reportado que detuvieron a un joven de 23 años como sospechoso de los actos y dieron a conocer que ya se conoce la identidad del atacante, sin embargo, ésta no puede revelarse aún para no afectar las investigaciones.
En redes sociales, extremistas han apoyado el ataque.
NIÑA DE OCHO AÑOS, UNA DE LAS PRIMERAS VÍCTIMAS IDENTIFICADAS DEL ATENTADO
Una niña de 8 años, Saffie Rose Roussos, una joven estudiante de 18, Georgina Callender, y un joven de 26, John Atkinson. Son solo las tres primeras víctimas mortales identificadas de las 22 provocadas por el atentado perpetrado anoche tras un concierto en Manchester de la cantante Ariana Grande, pero dan una idea del perfil del objetivo de los terroristas. Jóvenes, adolescentes y niños, como denunciaba la primera ministra británica, Theresa May, este mediodía. Las imágenes de estas dos británicas están inundando las redes para mayor conmoción de todo el país.
La pequeña Saffie había asistido al concierto de Ariana Grande con su madre, Lisa Roussos, cuando un terrorista hizo estallar un artefacto de fabricación casera, según han confirmado las autoridades del condado de Lancashire, al norte de Inglaterra. La organización yihadista Estado Islámico ha reivindicado la autoría del atentado.
La directora de la escuela primaria de Saffie, Chris Upton, la describió como “simplemente una maravillosa niña pequeña”. “La quería todo el mundo. Su calidez y amabilidad se recordarán con cariño”. “Saffie era callada y modesta, con un toque creativo”, dijo Upton, que describió la muerte de la niña como una “tremenda conmoción”. “La idea de que alguien pueda salir a un concierto y no volver a casa es desgarrador”, añadió.
La segunda víctima identificada es Georgina Callender, una estudiante de 18 años que asistía al centro de educación superior Runshaw College en Leyland, al noroeste de Manchester. La adolescente había twitteado el lunes que estaba “muy emocionada” de ver la actuación en Manchester.
En una declaración la escuela dijo: “Georgina era una joven estudiante encantadora que era muy popular entre sus compañeros y el personal y siempre aprovechó las oportunidades que tenía en la escuela. ”Nuestros pensamientos y oraciones salen a la familia de Georgina en este momento terrible, y pensamos especialmente en sus hermanos Harry y Daniel que también fueron ex alumnos de la escuela”.
El diario local “Manchester Evening News” ha recaudado cerca de 200.000 libras (230.000 euros) en una campaña a través de internet para ayudar a la familia de Callander. (Fuente: Aristegui Noticias / La Vanguardia).
Sé el primero en comentar