El trabajador de Lady Gaga ha recurrido a las redes sociales para dar las gracias a la artista por sus continuos y constantes mensajes de preocupación por su estado de salud y su recuperación.
Fischer también ha contado cómo fue el momento del secuestro y tiroteo que lo dejó abatido en el suelo en medio de un gran charco de sangre.
En los primeros momentos, su preocupación fue por el estado de Asia, otra de las perras de la artista que no llegó a ser secuestrada. Según cuenta en Instagram, solo comenzó a tranquilizarse al ver sana y salva a la pequeña
Fischer, de 39 años cuenta que “acuné a Asia lo mejor que pude, le agradecí por todas las increíbles aventuras que habíamos vivido juntas, me disculpé por no poder defender a sus hermanos y luego resolví que todavía trataría de salvarlos… y a mí mismo”, según recoge New York Post.
Este conocido amigo de los animales y paseador de perros de famosos celebra junto a Lady Gaga, el final feliz de esta historia. Durante dos días, Gustavo y Koji estuvieron desaparecidos hasta que una persona los encontró atados a una poste en una zona muy alejada de donde fueron secuestrados y los trasladó hasta una comisaría de policía.
Recuperado y con ganas de volver a la actividad, Fischer se muestra gradecido con la artista a la que recuerda que “nuestros bebés han vuelto y la familia está completa… ¡lo hicimos! Me has mostrado mucho apoyo a lo largo de toda esta crisis, tanto para mí como para mi familia. Pero tu apoyo como amiga, a pesar de tu propia pérdida traumática de tus hijos, fue inquebrantable. Te amo y gracias“.
Fischer concluye su emotivo mensaje preguntándose “¿Y ahora? Todavía se necesita mucha curación, pero espero con ansias el futuro y el momento en que me bombardeen con besos y lamidos (¿y tal vez incluso un pipí de emoción?) De Asia, Koji y Gustav “, concluye emocionado.
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