En José María Morelos el paso del huracán Grace dejó como saldo techos de guano destruidos, arboles caídos, campos anegados y la suspensión del servicio de electricidad, en especial en las comunidades rurales.
Miguel Ángel Put Pat, subdelegado de la comunidad de Miguel Ángel, dijo que afortunadamente los daños son solo materiales, con anegaciones menores, sin personas lesionadas.
La autoridad local comentó que el huracán “Grace” comenzó a sentirse de lleno a eso de las seis de la mañana. Muchos sintieron miedo, “pero los árboles nos protegieron, ya que recibieron la peor parte”, comentó.
La electricidad fue suspendida desde las cuatro de la tarde de ayer, mucho antes del paso del ciclón, al parecer por determinación de la Comisión Federal de Electricidad en Valladolid.
Habilitaron refugios, pero muy pocos quisieron dejar a sus animales. En total recibieron a 12 personas.
Máximo Puc, agricultor de Xcabil, lamentó que muchos no habían sembrado por la falta de lluvia, pero ahora el tiempo se fue al otro extremo, por lo que no habrá cosecha.
“El maíz da a los tres meses y ya se había atrasado las lluvias. Ahora no se podrá sembrar nada”, comentó.
Quienes sí sembraron, principalmente para aprovecharse del programa “Sembrando Vida”, probablemente perdieron sus milpas, opinó.
En la cabecera municipal, las calles lucían desiertas, con pocos comercios abiertos, por la falta de transeúntes.
Justino Arrejón, director del Mercado Municipal, comentó que muchos, en especial quienes tienen puestos ambulantes, perderán sus productos perecibles, al sumarse dos días de inactividad. Algunos otros sí abrieron, pero solo para constatar que no hay público al que venderle.
“Es lamentable, pero uno debe estar preparado. Si hay mal tiempo, mejor no te arriesgas a perder”, declaró.
Sé el primero en comentar