El Sindicato de Taxistas de Cancún, la nueva moneda de cambio de Marybel Villegas

>Amenazas de muerte, chantajes, simulaciones y enormes escándalos de corrupción en torno de la elección del nuevo dirigente sindical

Escuche mientras lee: “El Necio”; alegoría de la congruencia y el honor. Del maestro Silvio Rodríguez. “Me vienen a convidar a arrepentirme / Me vienen a convidar a que no pierda / Me vienen a convidar a indefinirme / Me vienen a convidar a tanta mierda”.

Para aquéllos que aún les queda alguna duda sobre los esfuerzos que se hacen para re-empoderar al grupo político y delincuencial de Félix Arturo González Canto y Roberto Borge Angulo, que se asomen a lo que acontece en el Sindicato de Taxistas de Cancún, “Andrés Quintana Roo”.

Resulta que, recientemente, Heriberto Núñez Cauich fue citado por Marybel Villegas Canché a una comida, el tema, su eventual llegada a la dirigencia del Sindicato de Taxistas de Cancún (STC) con la imposición de Eric Castillo Alonso ni más ni menos que en la tesorería.

La intención, desde luego, es fondear a la hija de Eric, Erika Guadalupe Castillo Acosta quien pretende llegar a la presidencia municipal de Benito Juárez y desde luego, apoyar económica y con votos a Marybel Villegas Canché para llegar a la gubernatura de Quintana Roo.

OPERACIÓN DELINCUENCIAL

Este es un tema que atenta directamente en contra de la Gobernabilidad en Quintana Roo, pero en especial, en Cancún; Eric Castillo, viejo conocido nuestro por instrumentar escarmientos que van desde la vandalización de vehículos hasta el asesinato; de quien sabemos, ha estrechado los lazos con la delincuencia organizada, se está encargando desde ya, de aterrorizar a todo o toda aquélla que se atreva a registrar, apoyar o a auto-proponerse como candidato.

Este sujetillo es el responsable de gestionar 500 concesiones de taxis propiedad de Félix González Canto y de Roberto Borge, no es más que un esbirro, pero desde luego, hasta en ello hay niveles.

La esbirra mayor es Marybel Villegas y ella ordena, en mancuerna con el “Parrita” (su marido), cómo se han de hacer las cosas, obedeciendo desde luego, las órdenes de sus patrones González y Borge.

LA VENTA ILEGAL DE LAS CONCESIONES DEL SERVICIO AL AEROPUERTO

Este vándalo, también es responsable de haber vendido las concesiones (placas) de taxis que dan servicio en el Aeropuerto de Cancún, al primo de Félix, Javier Zetina González, dueño de la empresa “Cancún Airport Shuttle”; una parte de esas concesiones eran del Sindicato y otras de “Maya Caribe”. ¿Sabe usted qué es lo más jodido del asunto?, que para que esas concesiones se pudieran negociar, era necesaria la aprobación de la Asamblea en pleno, y a pesar de existir evidentes violaciones, el Instituto de Movilidad de Quintana Roo no se ha querellado en contra de este delincuente. ¿Qué les falta?, se los prestamos.

Si usted cree que entre estas lacras de patas y colas pelonas existen valores como la lealtad, desde luego que está usted muy equivocado, de hecho, no hay un solo valor en sus huecos cerebros, -¿falta de instrucción?, ¿naqués de nacencia?, vaya usted a saber-.

Y esto lo digo porque, para que la señora Erika Guadalupe pudiera llegar a la diputación, el delincuente de su padre negoció con Alejandro Peralta Paredes, hoy, ya le ha dado la espalda y peor aún, lo tiene amenazado igual que al resto de quienes han hecho pública su intención de llegar a la dirigencia.

FUERA MÁSCARAS

¿Se ha preguntado usted el porque de la operación quirúrgica en contra de la Mara Hermelinda y porque no se aprovechó para meter de una vez al juicio a las Lauras?; ¿el por qué salió a decir Reyna Durán que los Cancunenses “no estamos solos”? -¡chaz, qué risa me cai!-

Y luego vino la declaración esta de que los diputados habrían garantizado que las concesiones de taxistas fueran heredables, PATÉTICA MENTIRA porque éstas han sido, de siempre, heredables.

Y ahora sale la señora esta, Erika Guadalupe Castillo a arengar sobre el tema de UBER.

Yo pregunto; ¿pa qué tanto brinco si está tan parejo el suelo?, ¿en verdad creen que somos estúpidos?; desde luego, es mucho más imbécil quien cree que los ciudadanos somos estúpidos.

Son unos corruptos de lo más vulgar que haya yo visto; lo que no entiendo es cómo hacen para hacerse los ofendidos cuando se les dicen sus verdades, pero sobre todo, lo que no puedo ni entender ni justificar, es el miedo patético que se les tiene.

A quien delinque, hay que fincarle responsabilidad y llevarlo a la cárcel y no dejarlo avanzar, resultan ser siempre el pinche perro que muerde la mano de quien le da de tragar.

Ciao.

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