CANCÚN, Q. ROO.- Tres niños de cuatro, seis y ocho años de edad permanecían encerrados en una habitación de su domicilio, entre heces fecales, alimentos putrefactos y envases de bebidas alcohólicas. Estaban abandonados a su suerte en el edificio J1, lote 02, departamento 301, manzana 88, Región 251.
Gracias a una denuncia telefónica anónima, la Policía Preventiva llegó hasta el departamento ubicado en el tercer piso del edificio, en la esquina de las calles Guadalupe e Isla Capri, donde constató que los hermanitos se encontraban cautivos, en un ambiente insalubre y condiciones deplorables.
No había padres o personas que se responsabilizaran por ellos, además, estaban entre alimentos podridos, defecaciones humanas y de animales, basura, envases de bebidas embriagantes, y en compañía de un peligroso perro pitbull. El hallazgo se hizo a las 13:30 horas de este miércoles 01 de marzo.
Para salvaguardar la integridad de los tres indefensos infantes, fueron rescatados y trasladados a la Unidad de Justicia para la Mujer, de la Fiscalía General del Estado (FGE), y posteriormente, entregados a la Casa de Asistencia Temporal (CAT) del DIF Benito Juárez.
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