Como si fuera parte de la lista de útiles, padres de familia en la Ciudad de México se dan a la tarea de aplicar a sus hijos pruebas COVID-19 para el regreso a clases.
El próximo 30 de agosto se reanudarán las clases presenciales en todo el país, en medio de la tercera ola de la pandemia, que de acuerdo con el Gobierno Federal muestra signos de ir a la baja.
En algunas escuelas privadas los directivos han pedido a los padres de familia el comprobante de pruebas COVID-19, ya sean rápidas o PCR, de que sus hijos no están enfermos.
Ante el nuevo requisito, padres de familia como Estela Lemus y Oscar Flores han acudido a laboratorios para aplicar alguna prueba a sus hijos.
En la secundaria sí le pidieron la prueba COVID, para estar más seguros, más bien los papás que están indecisos todavía. En la primaria todavía no, pero como ya hubo juntas con los directivos, la directora nos comentó que no estaba de más que la tuviéramos a la mano por cualquier cosa o por cualquier nuevo aviso de la SEP”, dijo Estela.
Además, autoridades escolares han informado que el regreso a clases presenciales será escalonado y alternado con las clases en línea, para evitar aglomeraciones.
Los alumnos deberán llevar un kit personal de higiene que deberá incluir cubrebocas de repuesto, gel antibacterial y sanitizante.
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