Estados Unidos lanzó “ataques de precisión” contra blancos asociados con el programa de armas químicas de Siria. La medida bélica que tomó el primer ejecutivo es en respuesta a que el sábado pasado el presidente sirio Bashar Al Assad llevó a cabo una “significativa escalada de un patrón de uso armas químicas por parte de ese terrible régimen”.
Trump aseguró que Estados Unidos no busca con este ataque “una presencia indefinida” en Siria y prometió que retirará sus tropas una vez que el Estado Islámico sea totalmente derrotado. Mientras daba su mensaje desde Washington, fuertes explosiones iluminaban el cielo y llenaron de humo a la capital siria.
La prensa siria reportó que las defensas aéreas derribaron 13 cohetes al sur de Damasco. Cuando el ataque terminó y los cielos sirios volvieron a oscurecerse, diversos vehículos con altavoces recorrieron las calles de Damasco reproduciendo canciones nacionalistas.
La ONG Observatorio Siria de Derechos Humanos informó que la ofensiva tuvo como blanco “los centros de investigación científica, varias bases militares, sedes de la Guardia Republicana y la Cuarta División en la capital y sus alrededores”.
Durante su discurso y en referencia a Rusia e Irán, Trump preguntó: “¿Qué tipo de nación quiere asociarse con el asesinato masivo de hombres, mujeres y niños inocentes?”.
Por su parte, el embajador de Rusia en Estados Unidos advirtió que habrá consecuencias por los ataques liderados por Estados Unidos contra Siria y agregó que no es aceptable insultar al presidente ruso.
“Se está estableciendo un escenario prediseñado”, dijo el embajador ruso Anatoly Antonov en Twitter. “Nuevamente estamos siendo amenazados. Nosotros advertimos que esas acciones no quedarían sin consecuencias”, agregó.
Sé el primero en comentar