CANCÚN, Q. ROO.- Un grupo de mujeres luchadoras sociales conmemoró de manera emotiva el Día Internacional de la Mujer en la ciudad de Cancún, exigiendo públicamente sus derechos humanos, y freno definitivo a la violencia de género y al machismo que impera en todos los ámbitos de la sociedad.
En el Monumento a la Mujer, de la avenida Tulum, protestaron enérgicamente por los más de 60 feminicidios que se han registrado en el municipio Benito Juárez, vestidas de color negro y empuñando grandes cruces de color rosado con los nombres de muchas de las asesinadas a sangre fría, de las cuales sus edades van desde los 15 hasta los 45 años, entre ellas, la inolvidable Karen, de 19 años.
“Por todas ellas, por su memoria, estamos reunidas aquí, abrazándonos. La sociedad de Cancún es gente muy indiferente, muy indolente, pero también es cierto que hay gente muy valiosa que ha dado una lucha digna por la equidad”.
“Queremos acabar con los feminicidios, queremos acabar con la violencia. Tenemos que aprender a ser indolentes, aprender a unirnos, no esperar a que nos secuestren a nuestros hijos, a nuestros padres o a un hermano. Tenemos que aprender a conocer nuestros derechos, aprender a ser solidarias”, dijo la profesora, Nancy Cohuó.
En el acto en el que también participaron representantes de la Coordinación de Madres, Padres y Tutores en Defensa de la Nación, se denunció que las reformas estructurales impulsadas por el presidente, Enrique Peña Nieto, están lacerando seriamente la economía de las jefas de familia, principalmente de las solteras.
“La Reforma Energética hace que los productos cada vez sean más caros. Nosotras somos amas de casa, tenemos que trabajar muchas horas al día para poder llevar sustento a nuestro hogar, ya no nos alcanza. Cada vez es más difícil comprar un kilo de tortillas que hoy en día cuesta 17 pesos, cuando la hora de trabajo nos la pagan a 8.90. Sube la gasolina, sube todo”,
“Las reformas que han aprobado, nos afectan. La laboral: recordemos que la lucha que llevaron las mineras hablaba de jornadas de trabajo, de lugares dignos, de salarios dignos, de atención médica. La Reforma Laboral está quitándonos todo esto y regresándonos a aquél pasado, como si la muerte de estas compañeras no valiera nada”, precisó Maricruz Carrillo Orozco.
