“No existe ningún pecado que la misericordia de Dios no pueda alcanzar y destruir, allí donde encuentra un corazón arrepentido”, indicó el Pontífice
CIUDAD DEL VATICANO.- El Papa Francisco permitirá a todos los sacerdotes que absuelvan a las mujeres del “pecado grave” del aborto, ampliando un permiso especial que había concedido en 2015 para el Año Santo de Misericordia que acaba de concluir.
“No existe ningún pecado que la misericordia de Dios no pueda alcanzar y destruir, allí donde encuentra un corazón arrepentido”, indicó el Papa en la carta apostólica “Misericordia et misera”, el documento de conclusión del Jubileo extraordinario que fue publicado ayer y en el que da las indicaciones para que los católicos continúen este tiempo de la misericordia, la reconciliación y el perdón.
En el mismo texto, Francisco recalcó que “el aborto es un pecado grave, porque pone fin a una vida humana inocente’’. Dado que la Iglesia católica considera el aborto un pecado tan grave, la absolución dependía de un Obispo, que podía escuchar la confesión de la mujer o delegarla a un sacerdote experto en esas cuestiones.
Pero en 2015, Francisco dijo que permitía a todos los sacerdotes otorgar la absolución por un aborto durante el Año Santo, del 8 de diciembre de 2015 al 20 de noviembre de 2016.
Al permitir ahora a perpetuidad que todos los sacerdotes absuelvan el pecado del aborto, Francisco aplica su visión de una Iglesia misericordiosa con esas mujeres que, como ha escrito en el pasado, consideraron que no tenían otra opción que tomar esa “decisión angustiante y dolorosa”.
Foto: Agencia Reforma
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