La Administración de Drogas y Alimentos de los Estados Unidos (FDA por sus siglas en inglés) rechazó que la campaña de dispositivos médicos “Neuralink” de Elon Musk comenzara las pruebas en humanos.
Los implantes cerebrales prometen revolucionar las situaciones de afecciones intratables como parálisis, o ceguera.
Sin embargo, las autoridades negaron la autorización para experimentar en el cerebro humano, pues describieron una serie de problemas que la empresa de Musk tiene antes de dar este paso.
Una batería de litio en el dispositivo, posibilidad de cables diminutos invadiendo otras áreas del órgano, dudas sobre la seguridad para retirar sin efectos secundarios, entre otras, son las preocupaciones que llevaron a la decisión de la FDA.
Los detalles sobre esta negativa no fueron revelados, puesto que al tratarse de una empresa privada no están en obligación de revelar a los inversionistas este tipo de interacciones que los regulan.
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