Golpeó Covid turismo y entretenimiento con más fuerza

PLAYA DEL CARMEN, Q. ROO.- Si bien la “nueva normalidad” trajo un poco de oxígeno para algunas actividades económicas esenciales, cientos de giros comerciales no sobrevivieron al confinamiento e inactividad de meses; se debilitaron económicamente a tal grado que ya no pudieron llegar a la reapertura; otros, pudieron migrar a la digitalización. Los esenciales, principalmente de alimentos, tuvieron algunas semanas de bajas ventas, sin embargo, no dejaron de percibir ingresos.

Podría interesarte

Cae en Veracruz sujeto buscado por homicidios en Playa del Carmen

Balean casa del subsecretario de Seguridad de Solidaridad

Acuerdan Mara y titular de Semarnat proteger la riqueza natural y combatir el sargazo con tecnología

Aún varios giros no han podido incluirse aún en la reactivación económica como los gimnasios.

Además del confinamiento, la pérdida de empleo y la incertidumbre financiera, contrajeron por algunas semanas la economía. Familias eliminaron los gastos superfluos por los necesarios, como garantizar renta, comida y servicios como gas, electricidad y agua.

Las actividades que más padecieron en el estado, definitivamente fueron la turística, de servicios y de entretenimiento.

La digitalización fue la diferencia entre vivir o morir durante la pandemia. Aquellos giros que no pudieron migrar por ser necesariamente presenciales, son los que más padecieron y siguen padeciendo.

En Quintana Roo se volvió común ver un acelerado aumento de repartidores de aplicaciones móviles y un incremento en el comercio digital, debido a pérdida de empleo derivada de la caída del turismo.

TE PUEDE INTERESAR: México, líder del Caribe

Mantener un negocio se ha convertido en todo un desafío, debido al que propietarios tienen que pagar renta y “aguantar” los gastos de operación sin estar generando ingresos, por lo que hay una gran cantidad de locales vacíos en las zonas comerciales de la ciudad, incluso, pese a la reapertura.

De acuerdo con la Comisión Económica para América Latina y el Caribe, los sectores más afectados son el comercio mayorista y minorista; las actividades comunitarias sociales y personales; hoteles y restaurantes; actividades inmobiliarias, empresariales y de alquiler, y las manufacturas.