Las lluvias provocadas por la interacción de los efectos de la depresión tropical remanente de Eta y el frente frío número 11, dejaron encharcamientos e inundaciones en las diversas alcaldías de Othón P. Blanco y comunidades rurales, provocando que durante la madrugada cientos de familias abandonaran sus viviendas en busca de zonas altas.
En el caso de Mahahual, el malecón y dos colonias conocidas como Kilometro 55 y 56, el agua superó los 70 centímetros de altura en algunas partes, dejando decenas de familias afectadas, principalmente de escasos recursos.
En el caso del malecón, el alcalde Pedro Marcial Rodríguez Cobos, dijo que, prácticamente quedó cubierto de agua, por lo que se necesitan extender los trabajos de limpieza que ya se realizaban en la costera, donde la arena terminó sobre la carretera debido al fuerte oleaje.
En la alcaldía de Javier Rojo Gómez, el alcalde Edel Martínez Méndez, reportó que las calles quedaron anegadas, mientras el mercado Benito Juárez, quedó con sus pasillos bajo el agua por unas horas, pese a que este año se invirtieron más de dos millones de pesos en modernización de los locales y el sistema de drenaje.
Otras comunidades turísticas como Huay-Pix, también quedaron inundadas en su zona baja, y las familias tuvieron que salir de sus hogares y refugiarse con algunos familiares, según atestiguó el delegado de la comunidad Juan Ruiz Torres, quien aseguró que la situación es grave.
“Hay familias afectadas, este problema cada año es peor, y con abundantes lluvias casi el 50 % podría quedar bajo el agua, debido al sistema obsoleto de drenaje que se tiene”, denunció.
En la ribera del Río Hondo, el nivel del afluente continua subiendo entre tanto comunidades como Cacao, Álvaro Obregón y La Revolución ya presentan afectaciones por inundaciones debido a las lluvias, sobre todos en zonas que están bajo el nivel de la carretera.
En la zona de Ucúm-Nicolás Bravo, comunidades como Nachi-Cocom y González Ortega y Francisco Villa quedaron anegadas y los habitantes tuvieron que romper las calles para evitar que el agua se acumulara.
En Nicolás Bravo, la colonia conocida como “los gatos”, también presentó anegación dentro las viviendas y los drenes a cielo abierto rebosaron por tanta agua de lluvia.
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