CIUDAD DE MÉXICO.- El exgobernador de Coahuila, Humberto Moreira, aseguró que no ha tenido trato alguno con narcotraficantes, pues “los perseguí como ningún otro, con generales y con militares, aunque el único narcotraficante que he conocido es Guillermo Anaya”, candidato panista en la norteña entidad y compadre del expresidente Felipe Calderón.
Moreira sostuvo, en entrevista con Adela Micha para El Financiero-Bloomberg, que no guarda rencores, pero puntualizó que está de regreso en la actividad política porque sólo desde el ámbito público puede desenmascarar a los “maleantes” y aclarar la falsedad de las acusaciones en su contra, como el tema de la deuda de Coahuila, la cual aseguró que es viable y se reflejó en obras, mientras que el expresidente panista Felipe Calderón “dejó 5 millones de millones de pesos de deuda, eso no lo sabe nadie”.
También dijo que no puede sentirse traicionado porque está ocupado en el objetivo superior de su vida, “desenmascarar a muchos criminales, incluyendo a aquellos que se han involucrado en la delincuencia organizada”, como acusa al candidato del PAN a la gubernatura de Coahuila.
“El origen está ahí, de la muerte de mi hijo (José Eduardo Moreira), esos maleantes eran quienes los enriquecían”, comentó al referirse a los políticos y empresarios involucrados en el negocio de las “narco-minas”, entre los que incluye a Anaya Llamas.
Luego el exgobernador surgido de las filas del PRI presentó el documento, con fecha del 28 de abril de este año, en el que citan a Guillermo Anaya en Sonora para que responda por diversos delitos relacionados con la explotación de minas de carbón.
“El señor es narcotraficante, está siendo citado, lo denuncian de haber matado a una señora y a un señor, no pido que le quiten la candidatura, pido que lo encarcelen ya, y si algo me pasa, pues fue ese malandro”, alertó.
Incluso, el aspirante a una diputación plurinominal bajo las siglas del Partido Joven cuestionó a su hermano, el actual mandatario de Coahuila, Rubén Moreira, por no haber actuado en este caso, y detalló que su relación como hermanos comenzó a fracturarse desde que Rubén era candidato, a quien presumió que le dio la candidatura a la gubernatura:
“Me doy cuenta de que Calderón quería poner a su compadre, entonces pa’ los toros del jaral, los caballos de allá mismo. Pone a su compadre, pongo a mi hermano”, admitió.
El también exdirigente nacional del PRI puntualizó que estaba orgulloso de nunca haberse arrodillado ante el poder, pues pese a las presiones de Felipe Calderón, nunca atendió sus peticiones; incluso afirmó que el expresidente le pidió en Los Pinos que le “regalara” elecciones en la entidad.
Igual recordó que hubo priistas que lo acompañaron al entierro de su hijo y que también le dio su pésame el entonces presidente electo Enrique Peña Nieto, a quien afirmó que sólo felicitó por el cargo, pero no ha vuelto a hablar con él.
Humberto Moreira aseguró que lo que siguió al asesinato de su hijo José Eduardo fue “una vileza, pues se le ha perseguido por diferentes acusaciones, pero presumió que cuenta con constancias de las autoridades españolas y estadunidenses que ratifican su inocencia.
Además, aseveró que el partido que encabezó, el PRI, le negó la candidatura, por lo que ahora a pesar de que es candidato plurinominal tiene que conseguir 100 mil votos para asegurar el registro del instituto político que lo abandera, por lo que, afirmó, está en campaña como si buscara la propia gubernatura. (Fuente: Proceso).
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