Este viernes, el Consejo General del INE someterá a votación un acuerdo con el que, ante la insuficiente presupuestal, se ordena “posponer temporalmente” todas las actividades de la revocación de mandato que se debían realizar a partir de enero, una vez que comprueben que existen 2.7 millones de firmas válidas.
Este miércoles, MILENIO adelantó que el INE analizaba dos propuestas para presentar este viernes ante el Consejo General: una de ellas en la que suspendería el proceso de organización y otra con la que planteaba un “plan B” con la tercera parte de las casillas establecidas en la ley, por ser el presupuesto con el que cuentan.
Fuentes de primer nivel confirmaron que, finalmente, la propuesta, que ya alcanzó mayoría de votos, es la de “posponer temporalmente” las actividades a partir de enero, hasta que se termine la verificación de firmas y si se logran las 2.7 millones previstas, para que entonces, la Suprema Corte de Justicia de la Nación se pronuncie sobre la controversia constitucional presentada y defina si la Secretaría de Hacienda debe darles los recursos faltantes o pueden violar la ley y no cumplir con las dimensiones de una elección federal.
“Al resultar insuficiente el ajuste presupuestal, a pesar del esfuerzo institucional de sumar economías y metas de ahorro (…) resulta necesario posponer temporalmente todas las actividades que no puedan ser fondeadas en su integridad, para cumplir con los requisitos constitucionales y legales, hasta en tanto la SCJN resuelva la cuestión que le fue planteada y las instancias competentes le generen la suficiencia presupuestal requerida”, indica el proyecto que será presentado mañana en el Consejo General.
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