La dirección municipal de Fiscalización del Ayuntamiento de Othón P. Blanco, continúa realizando operativos sorpresivos de inspección a los vendedores de pirotecnia en la capital del estado, con la finalidad de corroborar que cuenten con sus permisos y que no ofrezcan artículos que se encuentran estrictamente prohibidos.
Josué Jiménez Herrera señaló que a diferencia del año pasado donde se detectaron puntos de venta con productos explosivos, en esta ocasión quienes obtuvieron sus anuencias están cumpliendo con todas las recomendaciones que se les hicieron previamente, ya que son conscientes de las consecuencias de no hacerlo, como el decomiso de su mercancía, la suspensión para seguir operando y una sanción económica elevada.
“De lo que se trata es de garantizar la seguridad en esta temporada navideña, por eso los permisos que se otorgaron fueron los mínimos, estamos hablando de que solo se dieron 59 en todo el municipio y con estrictos requisitos de seguridad establecidos por Protección Civil, incluyendo pruebas de los productos para asegurar que no representen un peligro y excluyendo cualquier tipo de explosivos y voladores, pero por fortuna la venta de pirotecnia explosiva ha disminuido notablemente, lo que no quiere decir que no haya operativos, sino por el contrario los hemos intensificado.”
Mencionó que los permisos que otorgó la comuna, son para los denominados juguetes navideños o pirotecnia navideña como luces de bengala, buscapiés, chispitas o fulminantes, que son los que contienen un bajo porcentaje de pólvora y son los que pueden venderse sin ningún problema.
Sin embargo, reconoció que reducir el número de permisos y establecer requisitos estrictos, es lo que ha propiciado que incremente el comercio informal a través de las redes sociales, por lo que dijo, erradicar por completo la venta clandestina de los chifladores, palomas, cañones, cohetes y demás, sigue siendo un desafío.
“Desafortunadamente esto ha dado pie a que la venta ilegal crezca mayormente en las redes sociales y mientras haya quien lo compre pues esto no acabará, la intención no es afectar a quienes recurren a estas prácticas para obtener ingresos, sino exhortarlos a que eviten hacerlo porque muchos de los que compran estos artículos son menores de edad que no saben como manejar correctamente este tipo de pirotecnia y corren el riesgo de sufrir percances, hay que ser más responsables y conscientes de los peligros a los que se expone a los niños.”
Exhortó a la ciudadanía a denunciar este tipo de actividades y a no adquirir estos productos, aunque no descartan solicitar el apoyo de la policía cibernética para poder ubicar a los vendedores.
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