CANCÚN, Q. ROO.- El Ayuntamiento de Benito Juárez interpondrá en febrero una controversia constitucional por la modificación de la Ley de Alcoholes, pues asegura que invade la autonomía municipal al pretender el Gobierno del Estado determinar los horarios de comercios y su viabilidad.
Jorge Aguilar Osorio, secretario general de la Comuna cancunense, indicó que hay una injerencia en la autonomía municipal la que “de ninguna manera” pueden permitir, en especial porque además les significa la pérdida de varios millones de pesos en permisos de horas extra.
Indicó que se colabora con el Gobierno del Estado, pero cuando se invaden esferas, deben tomar este paso.
Viene siendo lo mismo que algunas atribuciones de la Ley de Movilidad, que es invasiva, aunque Remberto Estrada, (ex presidente municipal de Solidaridad( no puso la controversia”, ejemplificó.
Entiende que se trata de seguridad y por ello estima que la ley es de “buena fe”, pero no puede el Gobierno del Estado decir a qué hora deben abrir o cerrarlos negocios.
Sobre el cobro, indicó que es dinero que sirve a los benitojuarenses y no ven por qué “dejaremos que ese dinero se vaya a otros municipios, cuando acá es la mayor tasa de crecimiento”.
Señaló que el área jurídica ya tiene el caso y estima que el recurso se interpondrá a inicios de febrero.
Horario es por seguridad: Sefiplan
Yohanet Torrez Muñoz, titular de la Secretaría de Finanzas y Planeación (Sefiplan), señaló que el establecimiento de horarios de venta de alcohol a las 11 de la noche y como tope a las tres de la mañana, es por motivos de seguridad para evitar que se tenga un incremento en hechos violentos o acciones criminales en bares o restaurantes como los que se han generado en Playa del Carmen o Cancún. Apuntó que esta propuesta de ley será aplicada en el momento en que se publique en el Diario Oficial del Estado.
Como se recodará, hace unos días se dieron a conocer las reformas a la Ley sobre Venta y Consumo de Bebidas Alcohólicas en el Estado de Quintana Roo, conocida como “Ley de Alcoholes”, la cual estipula que bares, restaurantes y establecimientos afines, sólo podrán vender alcohol hasta las 23:00 horas en horario ordinario, teniendo un límite de venta hasta las 03:00 horas, siempre y cuando cuenten con la autorización para operar en horario extraordinario.
En este sentido, de acuerdo con el decreto número 300 por el que se reforman, derogan y adicionan diversas disposiciones de la Ley sobre Venta y Consumo de Bebidas Alcohólicas en el Estado de Quintana Roo, publicado en el Periódico Oficial del Estado el pasado 10 de enero, se establece las tres de la madrugada el horario máximo permitido para que los establecimientos de las zonas turísticas puedan seguir vendiendo bebidas embriagantes.
Lo anterior significa que los negocios asentados en la Zona Hotelera de Cancún, la Quinta Avenida de Playa del Carmen y el Bulevar Bahía de Chetumal, entre otros sitios turísticos que hay en el estado, ya no podrán vender alcohol después de las 3:00 de la madrugada.
Al respecto la titular de la Sefiplan comentó que esto no se trata de lesionar a ningún giro o sector empresarial, por el contrario forma parte de una determinación en materia de estrategias de seguridad donde se pondrá orden para evitar que se tengan hechos violentos o delictivos que afecten a los consumidores y destinos de Quintana Roo.
Explicó que este decreto es parte de las leyes establecidas desde hace varios años, pero que no se cumplían correctamente, por el contrario era totalmente discrecional y que ha provocado hechos donde se han generado situaciones lamentables.
Apuntó que esta medida será parte de las disposiciones que se tendrán por parte del estado pero donde los cobros de horas extraordinarias serán por parte de los municipios y en donde se conocen los topes mínimos y máximos de dichos horarios para que se cumplan, buscando en todo momento cumplir con dichas estrategias de seguridad.
Hay que recodar que desde el año pasado se han generado homicidios y balaceras en bares y restaurantes, los cuales seguían operando fuera de los horarios establecidos para la venta de alcohol.
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