El cuarto día del juicio en contra de Genaro García Luna, ex titular de la Secretaría de Seguridad Pública en el sexenio de Felipe Calderón, arrancó este lunes con la presentación de los alegatos iniciales.
En la Corte Federal de Nueva York, los fiscales que llevan el caso, encabezados por Brean Peace, expusieron que el ex encargado de la seguridad mexicana jugó un doble roble entre los años 2006 y 2012, pues mientras era funcionario público también estaba en la nómina del Cártel de Sinaloa.
En una breve exposición, el fiscal estadounidense dijo que a través de los testigos que llamará a declarar mostrará por qué su gobierno acusa a García Luna de los delitos de conspiración internacional para traficar cocaína a Estados Unidos en colusión con el Cártel de Sinaloa; de narcotráfico, y de proporcionar información falsa a un agente migratorio.
“La persona que debería encabezar la lucha contra el Cártel de Sinaloa era, en realidad, uno de sus principales aliados”, aseguró.
Sin embargo, César de Castro, el abogado defensor de García Luna, sostuvo que los fiscales estadounidenses basan sus acusaciones en testimonios de “criminales confesos” y no tienen pruebas contundentes del nexo de García Luna con el narco.
El abogado mostró fotos de García Luna con Barack Obama y Hillary Clinton para argumentar que éste trabajaba a favor de la seguridad, de acuerdo con reportes de periodistas que cubren el juicio en Brooklyn, Nueva York.
Tras un receso, algunos reporteros acreditados reportaron parte de lo sucedido en sus cuentas de Twitter, donde destacaron las posiciones contrastantes.
Otro detalle que ha reportado la prensa que en está en la audiencia es que entre las pocas personas que llegaron a la Corte se encuentra la esposa de García Luna y su hija.
La Corte retomó la audiencia para dar paso a la presentación de testigos.
