CHETUMAL, Q. ROO.- Al menos 14 órdenes de aprehensión fueron liberadas en contra de agentes del Ministerio Público del Fuero Común, elementos de la Policía Ministerial, así como oficiales y secretarios de la Fiscalía General del Estado (FGE), quienes están señalados de cometer tortura y abuso de autoridad en agravio de Héctor Manuel C.F., conocido como “El Diablo” y Maximiliano Ezequiel M.G., quienes fueron detenidos en 2013 señalados como operadores del Cártel del Golfo.
Esta información se filtró el sábado por la tarde, en la que se refiere que una vez que se cumplimenten las órdenes de aprehensión, los detenidos serán trasladados al Centro de Reinserción Social (Cereso) de Cancún, por lo que trascendió que había nerviosismo entre los trabajadores de la Fiscalía al enterarse de que un juez había liberado las primeras 14 órdenes de aprehensión y que al parecer faltarían unas 30 más.
El caso
Héctor Manuel C.F.,“El Diablo” fue torturado para se declarara culpable de la ejecución múltiple ocurrida en el bar “La Sirenita” de Cancún en marzo de 2013. Su detención se llevó a cabo unos días después el 16 de marzo de 2013 saliendo de la discoteca “Mandala”.
Los cargos contra Héctor Manuel C.F. fueron de haber dirigido y entregado al grupo de sicarios que perpetró la matanza en “La Sirenita”, en donde, entre otros, murió el subsecretario de Conflictos del Sindicato de Taxistas “Andrés Quintana Roo”, Francisco Achach Castro, sobrino de la exalcaldesa cancunense Magaly Achach.
Fue trasladado a los separos de la Policía Turística de ese destino, donde fue sometido por policías judiciales de Quintana Roo a una larga sesión de tortura de 30 horas, probada tras aplicársele el “Protocolo de Estambul”.
El 10 de marzo de 2014 fue liberado por primera ocasión mediante un amparo, en relación al multihomicdio en el bar “La Sirenita”.
Sin embargo, fue reaprehendido cuando salía del Cereso de Chetumal y sometido a un nuevo proceso en el penal de Cancún, con las mismas acusaciones, pero con un nuevo testigo que resultó ser otro de los supuestos sicarios.
La familia de Héctor Manuel C.F. mantuvo un intenso activismo para desmostar no solo que no participó en el multihomicidio, sino que además fue víctima de tortura.
En la cárcel sufrió varios atentados, e incluso se desataron motines a efecto de lesionarlo, documentó en su oportunidad la Visitaduría de Cancún de la Comisión de Derechos Humanos del estado de Quintana Roo.
La familia obtuvo una sentencia en la que el Tribunal Superior de Justicia ordenó ejercer acción penal en contra de 35 miembros de la Procuraduría, que participaron en la tortura en agravio de Héctor Manuel C.F.
Héctor Manuel C.F. estuvo en prisión tres años y seis meses en el gobierno de Roberto Borge, tras quedar en libertad en septiembre de 2016, el 30 de marzo de 2017 recibió disculpa pública por parte de la Fiscalía General del Estado.
En junio del 2017, Héctor Manuel C.F. fue ejecutado a balazos en un restaurante a la entrada de la delegación Alfredo V. Bonfil, donde también murió otra persona.
