CHETUMAL, Q. ROO.- La senadora Marybel Villegas, quien logró acceder a ese cargo a través de Morena y asegura ser fiel a ese partido, es realmente una infiltrada del círculo político de los priistas Félix González e Ivonne Ortega.
Pero también estaría detrás de una “mafia agriaría” que ha especulado con terrenos, generando ecocidios, despojos y expulsiones de comunidades en Yucatán y Quintana Roo, incluyendo Punta Piedra, en Tulum.
Es estos lugares los despojos amparados y ejecutados por el gobierno de Roberto Borge Angulo, fueron ventilados nivel nacional.
La suplente de Marybel Villegas en el Senado, Gabriela López Gómez, está ligada a Mauricio Góngora, a quien realizó la imagen de su poco exitosa campaña para la gubernatura.
Antes fue consultora de los ex gobernadores priistas de Yucatán Ivonne Ortega y Rolando Zapata Bello.
Su marido figura como socio en la empresa Desarrollos Punta Piedra S.A. de C.V., creada con la finalidad de comercializar la franja costera de Punta Piedra, una vez consumados los despojos de los hoteles.
Durante el gobierno de Roberto Borge se simularon juicios laborales para despojar y asegurar los hoteles boutique, incluso sacando a los turistas y usando la fuerza pública.
Sospechosamente, los beneficiados fueron la familia neoleonés Garza Ponce y Arturo Millet Reyes, esposo de la suplente de Marybel Villegas Canché.
LA MANZANA DE LA DISCORDIA
En Tulum se ubica Punta Piedra, una franja costera de gran valor y muy codiciada debido a la creación del ejido Pino Suárez en la zona, donde este se expropió al propietario original, a cambio de otras tierras.
A pesar de recibir estos nuevos terrenos, el propietario argumentó que el ejido no llegaba hasta la costa, y que esa zona continuaba siendo del régimen privado, por lo que la vendió a la familia Garza Ponce, de Nuevo León.
Los ejidatarios, por su parte, han efectuado operaciones de compraventa en Punta Piedra, en donde se han establecido varios hoteles “boutique”, todo mientras se efectuaban juicios, amparos y diversos litigios, con frecuente complicidad de diversas autoridades que daban o quitaban legitimidad a los documentos presentados.
En este panorama, los empresarios regios aprovechan la llegada de Ivonne Ortega a la gubernatura en Yucatán para asociarse con los expertos en especulación y despojo de tierras, la “mafia agraria” peninsular, notoria por adueñarse de zonas como Holbox o Isla Blanca y donde la actual suplente de Marybel Villegas, Gabriela López Gómez, fue el contacto.
Gabriela López Gómez trajo a un grupo de operadores políticos, procedentes de Nuevo León, conocidos localmente como el “grupo de Monterrey”, al que rápidamente se alineó.
El acta constitutiva de su empresa, realizada en Cancún, Quintana Roo y domiciliada en Playa del Carmen, muestra a Gabriela López como socia mayoritaria, con un 70%, y a su marido, Arturo Millet Reyes, con el 30% restante de participación.
Gabriela López Gómez y su esposo pertenecen a esta “mafia agraria”, de otra forma no se explica cómo es que Arturo Millet Reyes tiene más de 200 terrenos registrados en Yucatán y más de 20 en Quintana Roo.
Arturo Millet Reyes es considerado uno de los principales operadores de esta “mafia agraria” en la que figuran además el ex gobernador de Yucatán, Patricio Patrón Laviada, su hermano Alejandro, el ex director de Banamex, Roberto Hernández Ramírez (dueño de amplias extensiones de tierra en Tulum y Si’an Ka’an), y Alfonso “El Mosco” Pereira, artífice de la adquisición de gran parte de Holbox por Bepensa, por mencionar a algunos.
Todos ellos han gozado del amplio respaldo de los gobiernos priistas de Yucatán y Quintana Roo, para operar con impunidad en la compra y venta de tierras, incluso con el uso de la fuerza.
Estos mismos grupos, especialmente el de Félix González Canto, es el que hizo que Marybel Villegas pusiera como suplente a Gabriela López, como pago de favores.
LOS PIRATAS DE BORGE
Un reportaje publicado en la revista Expansión dio cuenta de la forma de operar del Borge y sus operadores en los despojos y venta de terrenos en Punta Piedra, así como en el lujoso edificio Maioris Tower, en Puerto Cancún, a través de laudos fraudulentos.
Primero creaban en el “papel” una empresa cuyo patrimonio era la propiedad que sería despojada, después se interponía una demanda laboral. En las Juntas de Conciliación y Arbitraje, al servicio de Borge, se efectuaba todo el proceso sin notificar al poseedor del terreno, hasta que sacaban en laudo, ordenando asegurar y entregar el terreno al “trabajador”, que de inmediato lo venía a los artífices de esta maniobra.
Así, en varios operativos, arrebataron cerca de ocho hoteles en Punta Piedra, utilizando decenas de policías, quienes sacaban a todo aquel miembro del personal o turista que se opusiera.
¿Y MARYBEL? ¿NUNCA VIO NADA?
Mientras todo esto ocurría, después que Marybel Villegas pasara por múltiples partidos, fue colocada por el gobernador Roberto Borge como diputada priista. Pese a que fue panista y perrededista, nunca se desligó de Roberto Borge, incluso era su “oreja”.
Como pago a sus servicios, Marybel fue incluida en la lista de candidatos del PRI, para así llegar al Congreso del Estado.
Como diputada, fue fiel seguidora de la “línea” de Borge, autorizando el endeudamiento histórico de Quintana Roo, que llegó a ser el segundo estado con más deuda per cápita.
También avaló la privatización del agua en Solidaridad y, llamativamente, votó a favor de la Reforma Energética, a pesar de la fuerte campaña en su contra por parte de Andrés Manuel López Obrador.
Después de su diputación, fue nombrada delegada de Sedesol, en reemplazo de Fabián Vallado, secretario particular de Borge.
En su obediencia, Marybel Villegas puso como su suplente a Gabriela López Gómez, esposa del líder de la “mafia agraria”.
Desde su llegada al Congreso, Marybel Villegas ha estado en una campaña permanente, en búsqueda de algún cargo de elección popular, pese a todo estos nexos con lo que AMLO más repudia, que es la plaga de la corrupción, piensa en llegar ser gobernadora.
