Agencia EQR
JOSÉ MARÍA MORELOS, Q. ROO.- Poco a poco la costumbre, en cientos de hogares de la zona maya de Quintana Roo, de utilizar el molino para moler el nixtamal, la materia prima de su alimentación básica ha ido en, esto debido al incremento de tortillerías como negocios familiares convencionales.
Ahora todos prefieren comprar la tortilla elaboradas con máquinas de acero, la costumbre de ir a moler temprano ahora y luego elaborar la tortilla a mano ya casi no lo hacen”, dijo Elizabeth Ek, propietaria de los pocos molinos que aún operan en la ciudad.
Mencionó que en el antaño, cuando José María Morelos era una pequeña localidad, la gente solía utilizar los molinos para moler los granos de maíz y con ello las mujeres preparaban las tortillas con las que el jornalero se alimentaba y luego se dirigía a trabajar la tierra.
Dijo que anteriormente había más de diez molinos ubicados en toda la cuidad y ahora sólo están en función tres de ellos.
“Solamente se les cobra dos pesos por kilo de maíz; las personas traen hasta seis cubetas de a diez kilos, por lo el que tienen que hacer fila para moler, gracias a Dios los molinos aún pueden funcionar y esperemos que sea durante mucho tiempo”, concluyó.
