La Organización Mundial de la Salud (OMS) considera que una vacuna contra la COVID-19 debe aprobarse en función de los resultados obtenidos en la fase 3 de ensayos clínicos.
Con el objetivo de evitar abusar de los atajos que podrían afectar los datos sobre su verdadera eficacia y seguridad.
Rusia ha anunciado que ya tiene lista una vacuna y que se prepara para vacunar a su población.
Esto a pesar de que acaba de entrar en la fase 3 de los ensayos.
China tiene avanzadas las investigaciones de dos vacunas que no han terminado la fase 3 de los ensayos clínicos.
Sin embargo, ha empezado a vacunar a lo que considera trabajadores esenciales.
La aprobación prematura de una vacuna implicaría riesgos, dijo Swaminathan.
Entre los que mencionó que dificultaría continuar con los ensayos clínicos aleatorios y, más graves aún, podría empezar a utilizarse una vacuna “que no ha sido estudiada adecuadamente”.
TE PUEDE INTERESAR: Majestuoso león se pasea entre carros en Parque Knowsley, Inglaterra
Sé el primero en comentar