Por: Adriana Olvera
Diego Castañón Trejo, presidente municipal de Tulum, cuenta con un grupo armado, costeado por particulares, que utiliza para promover despojos, intimidar a ciudadanos y resguardar a empresarios, caso único en Quintana Roo, y probablemente en México.
Se llama la “Policía Ejecutiva”, creada el año pasado como una corporación armada especial, costeada por empresarios hoteleros, pero supuestamente puesta al servicio del público.
Diego Castañón se aprovecho del temor del empresariado, que veía cómo la delincuencia continuaba fuera de control, colocando al destino turístico en riesgo.
Sin embargo, de nada sirvió, pues el destino prácticamente colapsó al año siguiente, por la inseguridad, falta de acceso a la playa y malas prácticas que toleraba este mal gobierno, más enfocado en sus propios negocios que en el bien común.
Desde que se dio la creación de esta “Policía Ejecutiva”, , tulumnenses creyeron que estos uniformados se dedicarían evitar que ciudadanos ingresaran en playas de hoteles, aunque se les aseguró que su verdadero propósito era la vigilancia de la zona costera.
Pues ni uno ni otro.
Los 25 policías ejecutivos no se preocupaban del acceso a playas ni de la seguridad en la zona costera, pues rápidamente esta “policía privada” fue puesta al servicio del presidente municipal y los intereses de su grupo político.
Esto quedó claro en mayo de este año, cuando un grupo de policías ingresaron al club de playa “Pancho Villa” e intentaron llevarse detenidos a su encargado, quien debió ingresar al mar para escapar. Los agentes usurpaban funciones de la Fiscalía General del Estado, al ingresar en propiedad privada e intentar aprehender a esta persona, sin mostrar orden judicial.
Dos meses después, en julio, la Policía Ejecutiva nuevamente fue utilizada, ahora como “grupo de choque”, para expulsar a familias de un asentamiento irregular, en horas de la madrugada, para que luego maquinarias pesadas arrasaran con sus casas.
Este hecho derivó en un bloqueo al camino de acceso al aeropuerto de Tulum, por las familias expulsadas.
En fecha más reciente, el 15 de noviembre, este mismo grupo armado ingresó a la fuerza al hotel “Zulum”, para detener a su propietario, quien fue lanzado a los separos de Seguridad Ciudadana sin motivo alguno.
Una vez encerrado, el grupo afín a Diego Castañon fue a tomar posesión de esta propiedad en disputa, mientras supuestos agentes ministeriales fueron a visitar al dueño a su celda, para indicarle que “la dejara por la paz”.
La víctima, Esteban Vizcarra González, escribió un escrito a la presidenta Claudia Sheinbaum, para denunciar los atropellos de esta policía privada, dedicada al despojo de propiedades en Tulum.
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