El 2023 será el año más caluroso del registro histórico, lo que implica que aumente el compromiso en temas de adaptación y mitigación por muchos países, indicó la directora de la Fundación Empresa y Clima, Elvira Carles Brescolí.
En la Conferencia de las Partes (COP28) que se realizará en Dubai, los países aportarán su balance de emisiones, donde se tomará en cuenta sus temperaturas para ver en qué posición están y qué requieren hacer.
Según la experta, las consecuencias del cambio climático impulsarán avances en la agenda de solidaridad, especialmente con los países vulnerables.
Por ello, durante la COP28 podrían presentarse algunos progresos pese a que los avances son lentos.
Carles Brescolí explicó que la cumbre del clima del pasado mes de noviembre en Sharm el Sheij (Egipto) tuvo al menos tres éxitos a destacar: el primero fue que “nadie se levantó de la mesa aunque la Unión Europea estuvo a punto de hacerlo porque se sintió muy presionada e incluso agredida”.
