El Fondo Nacional de Turismo (Fonatur) presentó ayer la evaluación de la Secretaria del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) del tramo 5 sur del Tren Maya.
La intención de esta evaluación es principalmente reactivar la construcción que hace algunos días fue suspendida tras varios juicios de amparo.
El Tramo 5 del Tren Maya cuenta con una “autorización provisional” para su construcción, que le da hasta 12 meses para presentar la MIA y estudios complementarios.
Debido a que aún se encuentra en proceso la integración del expediente y aun no inicia propiamente el Procedimiento de Evaluación del Impacto Ambiental (PEIA) que establece la Ley General del Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente (LGEEPA), el resumen ejecutivo y la propia MIA no han sido puestos a disposición pública.
Conacyt defiende el Tramo 5
El Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) a través de su Instituto de Ecología (Inecol) elaboró la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) del quinto tramo sur del Tren Maya, el cual está previsto que recorra de Playa del Carmen a Tulum en el estado sureño de Quintana Roo. El documento indicó que no se generarán impactos ambientales significativos y que el proyecto es “ambientalmente viable”.
Aunque desde el inicio del proyecto se ha generado gran polémica respecto al daño ambiental que podría ocasionar en el ecosistema de la zona, el presidente Andrés Manuel López Obrador ha mantenido su postura sobre continuar con la construcción, no obstante, activistas y ciudadanía le han pedido en distintas ocasiones que se realicen los estudios de impacto correspondientes.
De este modo, la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) elaborada por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) reconoció que con la construcción del tramo 5 del Tren Maya va haber una afectación al sistema de cuevas, cenotes y cavernas de la zona.
Dicho documento apunta a que las mayores afectaciones se producirán en la etapa de preparación del sitio y construcción, mientras que en la etapa de operativa y de mantenimiento, estos impactos serán mitigables.
“Dentro de los impactos observados debido a la realización del proyecto, destacan aquellos relacionados con el agua, en particular los relacionados con los procesos hidrológicos, que resultan de la posible interacción en el Tramo 5 Sur del trazo del proyecto con los sistemas kársticos, los cenotes, los flujos subterráneos y la posible afectación de la conectividad hidrológica natural”, se lee en el documento.
Así pues, el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) a través de su Instituto de Ecología (Inecol) resaltó en la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) que es necesario poner especial atención en el sistema hídrico de la zona para que sea mínima la alteración de los escurrimientos superficiales, la reducción de las áreas de infiltración y de evapotranspiración, así como en el manejo de aguas residuales, aceites, combustibles y otros contaminantes que puedan afectar los ríos subterráneos de la región.
